Desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero de 2022, Cáritas mantiene un proyecto de emergencia para satisfacer las necesidades básicas de las personas más vulnerables en Ucrania.
La respuesta de Cáritas Ucrania está dando prioridad al reparto de comida caliente, agua, kits de higiene básica, refugio temporal para personas que han abandonado sus hogares, servicio de lavandería y transporte seguro para las personas que buscar reunirse con familiares en otras zonas del país.
Cáritas cuenta con 36 oficinas repartidas por todo el país y trabajan de forma coordinada con las sedes operativas de la Cáritas nacional, en Kiev y Lviv.
Desde el comienzo del conflicto, las dos organizaciones Cáritas presentes en Ucrania, Cáritas Ucrania y Cáritas-Spes Ucrania, han estado al lado de la gente, y hasta ahora han brindado asistencia a unas 600.000 personas.
El pasado lunes se difundió la información que un tanque disparó contra el edificio del centro de Cáritas en Mariúpol, donde fallecieron dos miembros del personal y cinco de sus familiares. Al parecer este hecho ocurrió el 15 de marzo.
Ante esto, la organización emitió un comunicado, destacando que, debido a la ausencia de comunicación con la ciudad de Mariúpol y la falta de acceso a las instalaciones del centro de Cáritas, la oficina nacional de Cáritas Ucrania aún no cuenta con elementos suficientes para determinar qué sucedió y continúa recopilando información.
Fracturar la “caricia de Dios”
Por su parte, Cáritas Venezuela, emitió una nota de duelo en la que mencionó que “la violencia mortal de los tanques rusos han fracturado que hacen llegar la ‘caricia de Dios’ a la humanidad sufriente en Ucrania”.
En ese sentido aseguró que está sumada al duelo y la conmoción que viven las Cáritas de Ucrania, Cáritas -SPES y las de la confederación en todo el mundo por la noticia del asesinato de dos trabajadoras junto a otras cinco personas por un tanque en Mariúpol.