Cáritas San Fernando inaugura consultorio médico popular

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Foto: Alexander Medina

Este miércoles 5 de agosto el equipo de Cáritas de la Diócesis de San Fernando de Apure junto a su obispo Alfredo Torres inauguró un consultorio médico para atender a las personas que no pueden acceder al hospital de la ciudad y mucho menos a centros privados de salud.

Refería monseñor Alfredo Enrique Torres que este consultorio, ubicado en las instalaciones de la catedral de San Fernando, tiene la finalidad de atender casos de salud que se ubican en el nivel primario y que sus puertas estarán abiertas para los más pobres y necesitados.

Obispo de SF, Alfredo Enrique Torres, cortando la cinta/Foto: Alexander Medina

Por su parte, Juan Alexander Flores, director de Cáritas de esta Diócesis, explicó cómo surgió esta iniciativa de servicios de salud y qué especialidades se estarán ofreciendo.

Aspira que en este consultorio se atiendan a unas 100 personas al mes. Funcionará en horas de la mañana manteniendo los protocolos de cuidado sanitario.

La pediatra Yusbelys Pérez amplió la información sobre el modo de atención en este consultorio médico de Cáritas San Fernando.

Indicó que además de pediatría se ofrecerán servicios de nefrología, cardiología, medicina interna y sicología.

Reafirmó que todos los profesionales que estarán prestando este servicio lo harán de forma voluntaria como parte de la caridad cristiana.

Además de este nuevo espacio para consultas médicas primarias, cáritas diocesana de san fernando también cuenta con servicios de medición de talla y peso  para niños de 0 a 5 años, cuyos diagnósticos son remitidos al equipo nutricional de cáritas para su debida evaluación y asistencia alimenticia.

Medidas de talla y peso para los niños con cuadros de desnutrición/Foto: Alexander Medina

Por otro lado, el banco de medicinas también está disponible en esta sede regional de apure de esta organización social de la iglesia católica y aunque la pandemia les ha obligado a no reunirse en grandes grupos aún mantienen las ollas solidarias, pero ahora repartidas casa por casa en bicicletas.