De las 17 tormentas tropicales que se formarán en 2021 en Centroamérica, ocho se convertirán en huracanes, aunque serán de menor intensidad que los registrados en 2020, aseguró este miércoles un organismo regional en un informe meteorológico.
«Las temperaturas relativas (anomalías) de la superficie del océano Atlántico tropical y el Mar Caribe, se han normalizado totalmente, lo cual generan un ambiente propicio para el desarrollo de huracanes de menor intensidad», precisa el informe de los especialistas.
De los ocho huracanes previstos, cuatro «podrían ser intensos», advierte el informe del Sica, con sede en El Salvador.
La jefe del directorio del Centro de Coordinación para la Prevención de los Desastres en América Central (CEPREDENAC), Claudia Herrera. Advirtió «Es necesaria la prevención, mitigación y preparación» para reducir sus efectos.
En el océano Pacífico, la temporada de tormentas tropicales está prevista entre el 15 de mayo y el 30 de noviembre, mientras que en el Atlántico del 1 de junio al 30 de noviembre.
Debido a «las condiciones regulares de temperatura en el océano Pacífico se reduce al mínimo la presencia del fenómeno, «ni Niña ni Niño”. para los siguientes tres meses (de mayo a julio)», consigna el informe.
En noviembre de 2020, Centroamérica sufrió los azotes de los huracanes Eta e Iota, que dejaron al menos 200 muertos, así como millones de dólares en pérdidas a la economía.
Con un territorio de 523.00 km2, y cerca de 50 millones de habitantes, Centroamérica está expuesta a constantes erupciones de su cadena volcánica, a eventos sísmicos productos de fallas geológicas locales y a la interacción de las placas Cocos y Caribe.
También son recurrentes huracanes y tormentas, además de tsunamis a lo largo de 2.830 kms de costa en el Pacífico y 2.740 kms en el mar Caribe.
Fuente: AFP