Desde la llegada de la COVID-19 a Venezuela, en marzo del año pasado, más de 300 trabajadores informales de Mérida no han podido activar sus ventas en la avenida 2 Lora del municipio Libertador.
En vista de la situación, algunos comerciantes informales han tenido que trabajar dentro de algunos establecimientos comerciales a cielo abierto. Sin embargo, deben cancelar 3 dólares semanales de alquiler para poder trabajar.
Ramsés Guzmán, presidente de la Junta Directiva de la Avenida 2 Lora en Mérida, indicó a Radio Fe y Alegría Noticias que han tenido que migrar a otras actividades comerciales para poder subsistir. “Hay unos que se fueron del país, otros están sembrando, haciendo pan, empanadas, pero la mayoría simplemente no está haciendo nada”, puntualizó Guzmán.
Guzmán dejó claro que la alcaldía del municipio Libertador propuso el año pasado la reubicación de los comerciantes al mercado Soto Rosa antes del 13 de abril del 2020, pero la totalidad de 80 puestos asignados no es suficiente para reubicar aa más de 300 trabajadores informales, debido a que allí laboran otros comerciantes desde hace años.
“Vemos que esto se va prolongar mucho más. Ya casi vamos para un año sin trabajar y las personas necesitan activarse, nosotros estamos en plena disposición de que nos reubiquen, pero que nos asignen más puestos para todos”, pidió Guzmán.
Actualmente, algunas rutas cercanas a la avenida 2 Lora del centro de la ciudad se mantienen acordonadas por los cuerpos policiales, para evitar nuevamente la concentración de los trabajadores informales y evitar aún más los contagios por la COVID-19.
Los comerciantes exigen a los entes competentes que les den una solución inmediata. Para ellos, las reuniones que se han realizado con varios organismos del estado quedan como “cortina de humo” y se encuentran cansados de promesas incumplidas.