En el segundo día de cuarentena radical se ha visto una alta afluencia de usuarios en las calles andinas para dirigirse a los mercados principales que solo laboran hasta la 1:00 de la tarde.
Pero el movimiento de automóviles y motos se comienza a regular y controlar con la presencia de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana en las calles para regular el paso.
Los efectivos preguntan a los usuarios el destino al que se dirige y su intención de estar en la ciudad. Con esto se ha reducido la afluencia de vehículos en comparación a las semanas anteriores.
A los ciudadanos que no estuvieran usando el tapabocas, se les exigió retornar a sus casas o tendrían que ser llevados a las sedes de los cuerpos de seguridad para asistir a una charla sobre las problemáticas de contagios de la COVID-19.
También se pudo notar visitas de funcionarios a los diferentes locales abiertos autorizados por ser de venta de artículos de primera necesidad para verificar si se están cumpliendo las normas de bioseguridad.
Mientras tanto, en los mercados municipales y abiertos de ventas de verduras o los llamados buhoneros, la afluencia de personas es alta y el distanciamiento social quedó en el olvido.
Las ventas de pastelitos, comida rápida y panaderías también siguen laborando con la opción para llevar.