Organizaciones defensoras de los derechos humanos y opositores nicaragüenses desde el exilio se manifestaron en contra de la decisión, del Gobierno de Daniel Ortega, de expulsar del país a la Organización de Estados Americanos (OEA).
Héctor Mairena, miembro de la opositora Unida Nacional Azul y Blanco (UNAB), señaló que con esta acción el presidente Ortega aísla aún más al país centroamericano.
Es bueno recordar que el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, anunció el pasado domingo 24 de abril la expulsión de la OEA del país centroamericano y el retiro de sus diplomáticos ante el organismo multilateral.
“Hemos desconocido y desconocemos este instrumento de administración colonial que no representa en ningún momento la unión soberana de nuestra América caribeña», dijo Moncada.
En respuesta, y a través de un comunicado, el Consejo Permanente de la OEA condenó la toma de sus oficinas en Nicaragua, una acción sin precedentes, según declaraciones de su secretario general, Luis Almagro.
Según el reglamento del organismo, cualquier país que renuncia a la Carta de la OEA tiene que esperar dos años para que la retirada se haga efectiva.