Tarek El Aissami, vicepresidente económico de Venezuela, denunció este viernes una intentona terrorista frustrada contra la refinería El Palito, ubicada en el estado Carabobo.
Según El Aissami, el atentado frustrado iba a producirse antes de las elecciones del pasado 06 de diciembre. El ministro mostró evidencias de los explosivos que serían utilizados por los presuntos terroristas.
La pretensión, de acuerdo con el funcionario, era, además del daño económico, provocar una conmoción nacional que obligara a las autoridades a la suspensión o posposición, de los comicios parlamentarios del domingo.
El Aissami expresó que los implicados, de los cuales hay tres detenidos, vendrían desde Colombia para simular una célula interna venezolana descontenta con el Gobierno nacional.
El también ministro del Petróleo mostró en su alocución detonadores y materiales explosivos, «muy poderosos» incautados en Morón, estado de Carabobo, los cuales se utilizarían en la consumación del frustrado acto terrorista.
Además señaló que la acción era de conocimiento de los servicios de inteligencia de Estados Unidos y Colombia.
El Aissami dijo que no sólo hubiese podido desaparecer la refinería e instalaciones aledañas, sino «medio Puerto Cabello», porque pretendían detonar un oleoducto cercano como parte de un plan, el cual incluía, en una segunda parte, la incursión de un grupo de militares y oficiales desertores o retirados, venezolanos y colombianos, desde Cúcuta, Colombia.