En la desidia dicen vivir quienes residen en el caserío Rosa Inés de Barcelona por la falta de ayuda gubernamental para solucionar los problemas de luz, agua, cloacas y drenajes que padecen diariamente más de 90 familias.
Elizabeth Vargas, una de las habitantes de esta comunidad del estado Anzoátegui, ubicada en las adyacencias de la vía El Rincón – San Diego, criticó que, luego de 15 años viviendo en el lugar, nunca ha visto que autoridades locales se acerquen al menos a visitar.
“Aquí no hay planes ni siquiera para colocar aceras. Cada vez que llueve el agua se estanca en la calle porque no hay un caudal por donde puedan correr. Yo soy una de las principales afectadas por eso, ya que el agua se mete en mi casa”, contó la mujer a Radio Fe y Alegría Noticias.
Agregó que otro de los grandes dolores de cabeza para quienes habitan en ese caserío de Barcelona, así como sectores aledaños, es el tema eléctrico. Según Vargas, la luz va y viene varias veces al día y los cortes suelen extenderse por cinco o seis horas, sin contar que en ocasiones llega con mayor o menor fuerza de la normal.
“A mi se me quemó la nevera y el freezer por causa de las constantes fluctuaciones, pero ¿a quién uno le reclama?”, añadió la lugareña, quien ha tenido que intentar hacer una especie de acera frente a su casa para evitar que ingrese el agua cuando hay precipitaciones fuertes.
Otros vecinos contaron que una familia tuvo que desarmar su casa de zinc y repararla en otro lugar, pues el material se estaba dañando por la frecuente abundancia de agua. Aunado a eso, deben convivir con las cloacas provenientes del conjunto residencial Parque Vidoño, que se acumulan en la entrada de la comunidad.
Las personas piden a la alcaldesa del municipio Simón Bolívar, Sugey Herrera, que los ayude a solventar cada uno de los problemas lo más pronto posible.
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