En Mérida siguen los cortes eléctricos a pesar de que disminuyeron

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La organización Promedehum en el informe mensual denominado “Mérida Se Apaga”, correspondiente al mes de junio 2022, indicó que a pesar que hay una tendencia a la baja, siguieron los cortes eléctricos en la entidad merideña.

En el informe la ONG señaló que los cortes de luz han afectado de manera negativa la calidad de vida de los merideños, algunos derechos como la educación, la alimentación, la recreación y la salud se han visto perjudicados.

Ante esta situación, PROMEDEHUM quiso destacar que no se conoce ningún plan preventivo por parte de Corpoelec para solventar las emergencias eléctricas que ocurren durante las lluvias.

La población Merideña aún sigue sin percibir información y pronunciamiento por parte de las autoridades competentes, sobre la inestabilidad del fluido eléctrico.

Sectores monitoreados

Por ello, Promedehum dio a conocer los datos registrados por sectores y municipios que fueron monitoreados en Mérida durante junio:

En el sector El Campito en la parroquia Antonio Spinetti Dini, se registraron 49 horas y 53 minutos sin energía, representando una disminución de 39,94% con relación al mes de mayo. 

La parroquia Domingo Peña se registró 33 horas y 20 minutos sin energía, disminuyendo un 52,6% en relación a los datos obtenidos en mayo

En el sector La Pedregosa Sur, parroquia Lasso de La Vega, se registraron 16 horas y 12 minutos sin electricidad, lo que representa una disminución del 84,23% con respecto al mes anterior. 

Los Sauzales en la parroquia Mariano Picón Salas, se reportaron 2 horas y 15 minutos sin electricidad durante junio, lo que se traduce en una disminución del 68,96% en relación al mes de mayo.

Fuera de la capital del estado, en los municipios Cardenal Quintero y parte de Pueblo Llano, se registraron durante el mes 53 horas sin energía eléctrica, siendo un aumento del 120,83% con respecto al mes anterior.

En el páramo Merideño en el municipio Rangel, se contabilizó 23 horas y 44 minutos sin electricidad, siendo esto una disminución del 71,65% en relación al mes de mayo.

Pese a la supuesta normalización siguen las quejas de los ciudadanos ante las fallas del servicio, que afectan el derecho a una vida digna.