Más de cuarenta pacientes oncológicos que asisten a diario a la unidad “Doctor Ramón Millán”, ubicada en el Hospital Israel Ranuárez Balza de San Juan de Los Morros, estado Guárico, exigen la reparación urgente del equipo de branquiterapia que lleva dos años sin funcionar.
Hidel Gutiérrez, una de las afectadas, denunció que si no se realiza el tratamiento con la máquina de branquiterapia tiene que volver a retroceder y arrancar nuevamente con las quimioterapias.
“Nosotros lo único que queremos es que la organizaciones correspondiente que se aboquen y nos ayuden y ayuden a la doctora Carmen Romero, que bastante nos ha apoyado con el tratamiento que estamos recibiendo a que nos arreglen el equipo de branquiterapia, si nos arreglan el equipo no tenemos necesidad de salir de San Juan, fuera de la ciudad el servicio es súper carísimo, estamos hablando de 1.500 dólares por cada sesión”.
Gutiérrez señaló que tienen que recibir un total de 4 sesiones de branquiterapia, entre 25 a 30 sesiones de radioterapia y 6 de quimioterapia para poder completar el tratamiento.
“De branquiterapia en general son 3 o 4 y en Caracas que es el otro sitio de Venezuela donde lo están dado gratis, solo dan dos ciclos nada más, entonces, no nos sirve porque nos están faltando dos ciclos más”.
Por su parte, Jenny Cruces, quien viene del estado Carabobo y se encuentra en la gran lista de espera, exige que la máquina sea reparada para que la lista pueda descongestionarse y ella pueda ingresar a recibir el tratamiento en esta unidad oncológica, la cual alberga apacientes de todas partes del país.
“Vengo acá a San Juan de Los Morros a recibir la ayuda por parte de la unidad de radioterapia, estoy en lista de espera, es una gran lista de espera, nosotros acá, como dice mi compañera, vamos en una carrera a la muerte, nosotros no tenemos el lujo de esperar hasta mañana”.
Cruces hizo un llamado a las autoridades o fundaciones para que los apoyen en la reparación de este equipo que es necesario para estos pacientes, “porque toda nuestra inversión que hacemos con nuestro cuerpo con estas radios y esas quimios que nos colocan se puede perder al paralizar un tratamiento”.