Fe y Alegría Educomunicación de El Nula, parroquia San Camilo, municipio Páez, Apure, acompañó a las comunidades de Las Guacamayas, Cinta Blanca y Caño Regreso, con el fin de motivar a la población mayor de 15 años a culminar sus estudios de educación media y primaria.
Estos caseríos se encuentran a 4 horas en carretera destapada, es decir, sin asfalto, desde El Nula. Son comunidades que actualmente se encuentran olvidadas, con carencias de servicios públicos, atención social y donde las alternativas para la formación académica y de emprendimientos también son escasas, ya que hasta esos lugares no se acercan entes públicos ni privados que apoyen a mejorar la calidad de vida de estos ciudadanos.
La receptividad estuvo de manifiesto por parte de los jóvenes y no tan jóvenes campesinos en cada una de estas comunidades marginadas. El interés de estudiar con Fe y Alegría fue recíproco, ya que se lograron inscribir 15 participantes que arrancarán su periodo académico a partir del mes de septiembre en diferentes niveles, contando con el apoyo de líderes comunitarios, entre ellos el profesor Aníbal Sarmiento, quien es el orientador voluntario de esta zona campesina del Alto Apure.
La cita se llevó a cabo en la escuela primaria «Teresa Heredia» de Las Guacamayas, donde por cierto se logró recuperar su infraestructura con recursos y esfuerzos de padres y representantes, después de haber estado en un condiciones deplorables meses atrás.
La visita se desarrolló con la presencia de la Directora Regional de Fe y Alegría Educomunicación Andes Frontera Juxi Santos y la promotora educativa de El Nula Miraima Hernández, quienes tomaron nota para seguir planificando actividades académicas, recreativas y por supuesto las formativas y de acompañamiento en los ejes transversales como el Humano Cristiano para estas comunidades lejanas del casco urbano de El Nula.
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