Durante el cierre de frontera, los pobladores de la Guajira denunciaron en reiteradas ocasiones la mala atención alimentaria en este municipio del estado Zulia. Además, durante estos siete años de la frontera cerrada por pandemia, el programa de alimentos Mercal fue insuficiente para los habitantes, quienes quedaron bastante abandonados.
En vista de ello, Radio Fe y Alegría Noticias salió a la calle a hacer un recorrido para conocer las impresiones tras el anuncio de abrir la frontera colombo-venezolana definitivamente y la mayoría coinciden en que están en una expectativa positiva.
Muchos esperan que surjan oportunidades de empleos a beneficio de todos los pobladores. En cuanto al programa de alimentación las opiniones fueron variadas.
De acuerdo con Héctor González, las promesas de una pensión alimentaria no fueron cumplidas por el Gobierno nacional. Sin embargo, algunos habitantes aseguraron que las bolsas de comidas llegaban con regularidad, aunque a veces retardadas; también mencionaron que siempre estuvo a cargo de la organización de los Consejos Comunales.
Rosario Pocaterra comentó que sí hubo algunas ayudas con la dotación de alimentos en varias comunidades indígenas durante estos siete años, pero que el cierre de la frontera les volvió más dificultoso el trasladarse hacia Colombia para hacer sus diligencias y compras. Por otro lado, sobre la apertura de la frontera dijo que esto por fin les permitirá moverse entre el municipio y el vecino país con más factibilidad.
Al respecto de la movilidad, Yolanda Atencio precisó que durante los siete años el servicio de transporte tuvo muchas fallas, lo cual también les impedía el traslado de los habitantes.
Por su parte, Samary Montiel contó que los mismos habitantes siempre han solventado su situación alimentaria, de transporte y demás.