El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo, anunció que asumirá la Presidencia del país pese a los intentos de impedirlo por parte del Ministerio Público, el Congreso y un tribunal que ha dado curso a las acusaciones del MP.
El 9 de diciembre, el Ministerio Público de Guatemala informó que las elecciones presidenciales en las que fue electo Bernardo Arévalo “no son válidos”.
El MP argumentó que durante estas elecciones ocurrieron “presuntas irregularidades administrativas del Tribunal Supremo Electoral (TSE)”.
Ante estas arremetidas del MP en su contra, Arévalo ya avisó que asumirá la presidencia tal como está previsto en la Constitución. El presidente electo que aguarda por el 14 de enero de 2014 para asumir el poder dijo “que no quepan dudas” de su determinación de asumir la Presidencia.
Esta publicación es una respuesta frontal a los intentos del actual Gobierno y parte de su estructura judicial de evitar el ascenso de Bernardo Arévalo a la jefatura del país centroamericano.
El 14 y 15 de enero, que no quepan dudas, todas las personas libremente electas vamos a asumir.
— Bernardo Arévalo (@BArevalodeLeon) December 11, 2023
Crónica de una guerra de la Fiscalía contra Bernardo Arévalo
Desde agosto de 2023, la Fiscalía General de Guatemala inició una abierta guerra judicial contra Arévalo desde agosto. En ese entonces eran los instantes previos al balotaje de la primera vuelta cuando Arévalo empezó perfilarse como presidenciable.
Desde el primer momento, las acciones están lideradas por la fiscal Consuelo Porras, una funcionaria muy cuestionada por sus acciones afines a la candidata perdedora con conexiones en el actual Gobierno, Sandra Torres.
Una vez que Arévalo ganó las elecciones, las acciones judiciales apuntaron contra el partido Movimiento Semillas. Porras también lideró todas las gestiones judiciales que terminaron con la suspensión del partido que fue la plataforma que llevó a Arévalo a ganar las elecciones presidenciales.
No conforme con la suspensión del Movimiento Semilla, la Fiscalía allanó la sede del partido y la Corte Electoral. También ejecutó el decomiso de las actas electorales.
Tribunal Supremo de Justicia enfrentado a la Fiscalía
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) rechazó las acusaciones del Ministerio Público y reafirmó que los resultados “son inalterables”. La máxima instancia judicial advirtió de que en caso de que Arévalo y la vicepresidenta electa, Karin Herrera, no asuman el poder, habrá “rompimiento del orden constitucional”.
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