La Iglesia Católica de Argentina ha pedido a los senadores que reflexionen con conciencia antes de la decisiva votación que tendrá el martes 29 la Cámara Alta de un controvertido proyecto de ley para legalizar el aborto.
La propuesta de legalización ha sido impulsada por el oficialismo y ha dividido a la sociedad con una fuerte influencia católica.
Durante una celebración religiosa por el “Cuidado de la Vida Naciente” en la Basílica de Luján, a unos 60 kilómetros al oeste de Buenos Aires, este sábado 26, el presidente de la Conferencia Episcopal argentina, Oscar Ojea calificó al tema como “ética humana, prereligiosa, sostenido por la ciencia médica y el derecho”.
“Virgen Santísima, te pedimos que detengas tu mirada sobre los legisladores que tendrán que decidir sobre un tema de delicadeza tan extrema; que puedas provocar una serena reflexión en sus mentes y en sus corazones, que no renieguen de sus convicciones más profundas”, rogó Ojea.
Los senadores de Argentina decidirán si convierten en ley el proyecto a favor del aborto, luego que el 11 de diciembre la Cámara de Diputados le diera media sanción al texto, donde se estipula la interrupción legal y gratuita de los embarazos hasta la decimocuarta semana.
De ser aprobada, la norma podría marcar el camino hacia un cambio más amplio en América Latina, región con una gran mayoría católica usualmente renuente a modificaciones legales que afecten a la sexualidad o la familia tradicional.
El Parlamento argentino rechazó en otras oportunidades el proyecto para despenalizar el aborto.
Una norma similar se votó en 2018, pero tras la aprobación de los diputados fue rechazada en el Senado de la Nación, cámara identificada como mucha más conservadora.
La actual normativa argentina solo permite la interrupción voluntaria del embarazo cuando hay un riesgo grave para la madre o en caso de violación, aunque los activistas destacan que las mujeres muchas veces no reciben atención adecuada, en particular cuando son pobres.
Con información de La Voz de América