Irán se metió a la guerra en el Medio Oriente de manera directa al ejecutar un ataque militar contra posiciones del grupo terrorista Estado Islámico. De acuerdo con el portal de noticias alemán DW, el ataque se ejecutó este martes 16 de enero.
El ataque habría sido llevado a cabo con bombardeos, argumentando que son parte del “régimen sionista que apoya a Israel y además sirven como espía”.
Otro detonante habría sido el atentado que se atribuyó el Estado Islámico en la ciudad de Kerman, en Irán, el 3 de enero de 2024. De hecho, Irán afirmó que el ataque con misiles a puestos del Estado Islámico es una venganza por el atentado en Kerman.
La Guardia Revolucionaria comenzó los ataques de madrugada, poco después de la medianoche, y lanzó un total de 24 misiles “Kheibar Shekan” contra objetivos “antiiraníes” en Siria e Irak.
Del total de misiles usados en el ataque, once habrían sido lanzados con el objetivo de impactar en el cuartel general del Mossad israelí en Erbil, capital de la región iraquí. El ataque dejó cuatro muertos en el interior del cuartel, según un comunicado del cuerpo militar, refierió DW.
También se conoció que ocho misiles cayeron cerca del consulado de Estados Unidos. Los otros 13 misiles estuvieron dirigidos contra objetivos en Siria del EI, grupo que reivindicó el doble atentado de Kerman que causó 94 muertos el 3 de enero.
Uno de los motivos es la venganza
El atentado ocurrió cerca de la tumba de Qasem Soleimani, un general iraní que encabezaba la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, cuyo cuarto aniversario de muerte había convocado a miles de seguidores.
Irán accionó militarmente en un momento muy complejo y de alta tensión en Medio Oriente que involucra por un lado a Israel, Estados Unidos, Reino Unido, Irak; y por el otro, Irán, Yemen y sus aliados Hamas en la Franja de Gaza.
Con información de AFP y DW.
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