La educadora y coordinadora del programa Madres Promotoras de Paz de Fe y Alegría, Luisa Pernalete, expresó que la vuelta a la escuela reduce desigualdades y ayuda a subir el ánimo de los niños.
Pernalete señaló que el impacto de las escuelas cerradas fue muy negativo en Venezuela y en el mundo, no solo desde el aprendizaje de los niños, sino porque hubo una influencia negativa entorno a violencia intrafamiliar, la salud mental, el manejo de la ansiedad y las emociones.
«Volver a clases semipresencial va a ayudar al ánimo de los niños en general. A ellos les gusta ir a la escuela, quizás no a hacer tareas, pero les gusta el ambiente y compartir con sus compañeros. Uno saluda así sea progresivo y paulatino el proceso porque es algo bueno en la salud mental de los niños, niñas y adolescentes», afirmó Pernalete.
La vuelta a clases jugaría un rol importante para reducir la desigualdad entre aquellos estudiantes que tienen acceso a Internet y teléfonos inteligentes para estudiar con los que no tienen.
A eso hace referencia Pernalete, sobre que la escuela reduce las brechas. «Puede que en su casa (el niño) no tenga los mismos artículos que sus compañeros, pero en la escuela tiene un pupitre igual a todos. Tiene probablemente una biblioteca o una sala de computación y un maestro que le va a ayudar».
«No todo puede depender de la escuela, pero se puede trabajar ayudando a la formación de los representantes buscando estrategias multimodales para el trabajo semipresencial. Los maestros tienen que ser muy creativos para no solo mandar tareas», refirió.
Indicó que durante una clase habrá algún estudiante que busque más información para complementar lo que dice el profesor en la lección, habrá otro estudiante que no lo pueda hacer porque no tiene la herramienta, es por esa razón que Pernalete dijo que son los docentes los que deben precisar quienes son los alumnos más vulnerables para ayudarles de manera presencial en el salón de clases.
«Va a ser un año fuerte»
La coordinadora del programa Madres Promotoras de Paz de Fe y Alegría destacó que la educación a distancia ocasionó un agotamiento en los niños, padres y maestros porque les tomó de imprevisto.
«Hemos tenido año y medio de cansancio. En los educadores han subido los niveles de ansiedad, sobre todo por los salarios tan bajos y la situación del país»; aún así este reto de volver a las aulas en medio de una pandemia será «fuerte». Solo se podrá trabajar en equipo, acotó.
En este sentido precisó que Fe y Alegría da herramientas que ayudan a mejorar el trabajo en las instituciones educativas.