En el día de San José, cada 19 de marzo, también se recuerda a los artesanos, artistas que se refugian en el barro, la madera y la palma para resistir y subsistir.

En la fundación Artesanos Group trabajan en la documentación y en la promoción de las expresiones culturales y de las personas que lo hacen posible.

Carmen Julieta Centeno es la presienta de la organización y dijo en el programa Háblame Bajito, que transmite Radio Fe y Alegría Noticias, que están dedicados a la promoción de los cultores a través de la edición editorial.

Artesano Group se fundó hace 21 años y trabaja en los estados Delta Amacuro, Lara y Nueva Esparta con artesanos que intentan reponerse de la crisis económica y transmitir conocimientos a las nuevas generaciones.

“En Lara, trabajan con lo artistas de Quibor y Guadalupe; en Margarita con los de El Cercado; y en el Bajo delta con artesanos waraos”, expresó.

La alfarería artesanal margariteña, por ejemplo, se sostiene sobre técnicas que se conocen desde 1533, pues la forma tradicional se mantiene y ofrece variedad y diversidad.

Palma, barro y madera

La artesanía venezolana destaca tres elementos comunes: la palma, el barro y la madera como materia prima para la creación de piezas.

En el Bajo Delta, las artesanas Warao trabajan la palma de moriche para crear las cestas, bolsos y otros artículos. En Margarita se trabaja con la palma datilera para hacer bolsos y mapires.

Cada región es rica en técnicas y conocimientos ancestrales, destacó la representante de la organización, Carmen Julieta Centeno.

“El artesano representa la puesta de valor de nuestra cultura”, dijo.

“La fundación sustenta los programas y proyectos culturales a los cuales se ha ligado en estos 21 años, tratando de documentar y sentar las bases para que el día de mañana la memoria del artesano permanezca en el tiempo”, agregó.

Hacedores de país

En Artesanos Group crearon el programa Hacedores de País para contribuir con los artesanos en la creación de espacios para la enseñanza y la promoción de sus obras.

Como parte de la estrategia, se dedican a la edición editorial como herramienta para mostrar la vida y los talentos de las personas que se dedican a la artesanía.

En 2016 se publicó La Alfarería Popular del Cercado, una obra para mostrar la riqueza cultural de este sector margariteño. “En ese momento, registramos a una serie de artesanas que hacían la alfarería ancestral, no solamente documental sino en video y hoy por hoy, algunas han fallecido”, resaltó la señora Carmen Julieta.

De igual forma, se registró a Juan José Bermúdez, un artista que tenía 14 años y ahora ya tiene 25. “Es un gran alfarero y ceramista contemporáneo”.

Con la historia de Juan José se rehabilitó la escuela de cerámica de El Cercado. “Artesanos de otros lugares que quieren venir hoy a la escuela”, relató la especialista en arte.

Puedes descargar el libro Nuevo País de la Artesanía Contemporánea, en el que se muestran los rostros y las historias de los nuevos artesanos venezolanos vinculados a la fundación.

La escuela de alfarería de Margarita

“En la escuela de alfarería reciben a unos 70 niños y jóvenes que provienen de las escuelas públicas y privadas a tener una experiencia y un intercambio de saberes”, contó la representante.

“Podemos sentirnos orgullosos de tener unos alfareros de primer orden y unos artesanos que nos representan en cualquier parte del mundo”, añadió.

El artesano

La representante de la organización pidió apoyo para los artesanos, porque a veces no hay quien les compre la producción por los costos de traslado o la ausencia de promoción del Estado.

En Caracas, la organización abrió Casa País, un espacio para la exposición de las obras artesanales. Es un lugar que permite mostrar a compradores e inversores.

Sala de exposición Casa País en Caracas.

Por otro lado, en alianza con Banesco se editó libro llamado Nuevo País de la Artesanía Contemporánea. En esta obra se muestran algunos artesanos tradicionales y la fusión de diversos técnicas y nuevos diseños artísticos.

La artesanía no es un proceso rústico, sin técnica ni acabado; por el contrario, es una práctica fina, en la que existen códigos y se requiere de una altísima destreza para lograr piezas de alta calidad.

De generación en generación

En la mayoría de los lugares, los conocimientos se transmiten por generaciones en las familias. La fundación promueve la educación como método para que el conocimiento se mantenga.

Los artesanos se esfuerzan en mantener la producción y de enseñar a los más jóvenes de sus familias, aseguró Carmen Julieta. Asimismo, desde la fundación se promueve la creación de escuelas y talleres, pero hacen falta políticas de Estado para que la producción pueda salir y venderse.

El intercambio generacional también permitió que la fusión de técnicas ampliaran los mercados. Los nuevos creadores de moda, por ejemplo, demandan materiales específicos a los artesanos para la creación de piezas artísticas.

Artesanos en peligro

La crisis económica pone en riesgo a los artesanos, porque si no tienen un trabajo sostenible, que les permita vivir de lo que saben hacer, buscan otros oficios.

En el contexto venezolano, los artesanos no migraron territorialmente, pero sí de oficio: buscan otras formas de trabajo que les permita cubrir las necesidades básicas.

Los artesanos necesitan cobertura de la seguridad social, tener un seguro médico y acceso a materia prima.

De igual forma, es necesario generar políticas públicas para que los artesanos puedan fabricar y vender libremente sus productos en el mundo.

El Estado debe facilitar los medios para que los artesanos puedan desarrollar plenamente sus actividades y promover sus obras en otros países para promocionar la cultura venezolana.

Escuche la entrevista que ofreció Carmen Julieta Centeno a la periodista Carlota Rojas:

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