Según las autoridades, los hechos son responsabilidad de grupos criminales que operan en la zona, que realizan robos de ganado y secuestran a ciudadanos para pedir rescates.
Al menos 88 personas perdieron la vida en medio de un ataque perpetrado por un grupo criminal el pasado jueves 3 de junio. Así lo informó la Policía de Nigeria el domingo 6 de junio.
Un portavoz de la Policía aseguró que el número de víctimas podría aumentar y señaló que los hechos se produjeron en medio de un robo de ganado en siete aldeas del noroeste del país.
Decenas de ladrones armados llegaron hasta el lugar y, de acuerdo con el portavoz de la Policía del estado de Kebbi, «en principio fueron hallados 66 cuerpos, pero luego se encontraron 22 más».
Se estima que el número de víctimas podría aumentar, mientras que la investigación sobre lo ocurrido continúa.
Miedo en las aldeas
Según testigos, los atacantes se desplazaban en motocicleta y las aldeas afectadas fueron las de Koro, Kimpi, Gaya, Dimi, Zutu, Rafin Gora e Iguenge en el distrito de Danko-Wasagu.
El funcionario explicó que, tras los hechos violentos, la Policía desplegó agentes en la región para evitar nuevos ataques del grupo criminal. No obstante, el miedo llevó a los residentes de las aldeas a huir de sus hogares.
En meses recientes han intensificado los ataques contra escuelas y universidades, para realizar secuestros masivos de estudiantes y pedir dinero a cambio de su liberación.
Los hechos violentos se han intensificado en los últimos diez años por la presencia de grupos criminales que actúan en el noroeste y centro de Nigeria.
Las investigaciones de las autoridades nigerianas indican que estas organizaciones operan desde campamentos ubicados en el bosque de Rugu, que se extiende por los estados de Zamfara, Katsina, Kaduna y Níger.
Fuente: AFP