Juan Guillermo Requesens, padre del líder político Juan Requesens, expresó que su hijo no ha sido atendido por una muela rota que durante tres días le causó fiebre, hinchazón y dolor.
Requesens indicó que el día sábado le habían llevado comida al parlamentario de 29 años en El Helicoide, cuando se percataron de su molestia, y un inspector les dijo que debían introducir un documento ante la jueza para que autorizara su traslado y lo atendieran. «Mientras tanto, mi hijo está muriendo de dolor», lamentó en entrevista con Radio Fe y Alegría Noticias.
Aseguró que vive una desidia desde que encarcelaron a su hijo y le preocupa que su primogénito tenga la cara hinchada, pues esto significaría una infección por la muela rota.
“Hace 4 días le pregunté que dónde lo habían atendido, y me dijo que fue en la Unidad Odontológica que tiene el Sebin en Plaza Venezuela, y no fue en el hospital Militar como habían dicho”, señaló.
Asimismo, detalló que al diputado de la Asamblea Nacional lo atendieron odontólogos generales, sin embargo, “necesita un tratamiento especial y allí no tienen especialistas”.
También contó que cuando lo vio le preguntó por un tratamiento de antibióticos que le había comprado hace días “y me replicó: ‘¿cuál tratamiento?’. Y supe que se los habían robado y no le habían dado nada”.
La familia del diputado exige que le permitan ver a los médicos de confianza para que le hagan una evaluación física y psicológica.
“Solo lo hemos visitado seis veces desde que él está secuestrado. Permiten visitas miércoles y jueves”, precisó.
El preso político convive con olores nauseabundos, puesto que en el baño de su celda hay un bote de aguas servidas y, para rematar, no hay ningún tipo de ventilación. Esto perjudica su recuperación y lo expone a otras enfermedades. Además, su celda está completamente aislada.
El famoso video “confesando”
El 10 de agosto salió a la luz pública un video donde el líder de la tolda amarilla hablaba sobre su presunta implicación en el intento de magnicidio contra el presidente Nicolás Maduro. Requesens habló sobre el tema, asegurando que a su le dieron Escopolomina (droga) con agua para obligarlo a decir lo que ellos querían, puesto que esta sustancia controla la voluntad y produce amnesia.
Según el padre del acusado, es una aberración jurídica “que no tiene ni pies ni cabeza, donde violentaron sus derechos fundamentales”.
El 7 de agosto Juan Requesens fue detenido y el 14 se realizó la primera audiencia, tras más de nueve horas de espera, en la que se le imputaron ocho cargos al parlamentario. Entre ellos: instigación pública continuada, homicidio calificado en grado de frustración contra el presidente Nicolás Maduro, homicidio calificado en grado de frustración contra los militares de la Guardia Nacional Bolivariana, uso de artefactos explosivos, asociación para delinquir, financiamiento al terrorismo, daños a la propiedad y traición a la patria.
Por Nazaret Torres Padrón