Habitantes de la Sierra de Perijá aseguran que estos incendios no los sorprenden a menos que sea un forastero que no conoce la realidad del pie de monte.
Los indígenas afirman que en esta época de verano o periodo seco es cuando se suscitan los incendios en las montañas pero al hacer un recorrido por cualquier camino de Perijá, también hay potreros ardiendo.
Fray Nelson Sandoval, párroco de El Tukuko, informó a través de sus cuentas en redes sociales que desde la comunidad yukpa se observa un incendio de vastas proporciones que devora el cerro Piyitakü con altísimas llamas que crecen y avanza con la velocidad de la brisa.
El párroco de la zona denunció que esta situación se puede prever y controlar al mismo tiempo, pero no existen políticas ambientales por parte de Inparques.
“Inparques sigue siendo responsable de que esto suceda, porque es el organismo encargado de la preservación de los parques nacionales y sus trabajadores no tienen transporte, ni equipos apropiados para sofocar el fuego. Me atrevo a decir que tampoco tienen entrenamiento adecuado”, destacó.
El fraile capuchino indicó que esta institución gubernamental está afectada y adolece de toda la situación que atraviesa este país. “Como no hay inversión, carecen los planes de prevención y educación, única manera de concienciar a las comunidades”, dijo.
El sacerdote apuntó que “en Machiques señalan que son los yukpas quienes prenden fuego en la montaña y ocasionan estos incendios, es verdad, pero también es cierto que el Estado debe tener una política ambiental para la conservación de los parques y que en la sierra de Perijá, al ser un parque habitado, debe haber una mayor vigilancia e interacción de estas instituciones con las comunidades indígenas. Esto a fin de evitar incendios de grandes magnitudes y evitar catástrofes como las que estamos viendo con estos grandes incendios dónde se afectan la flora y la fauna y en definitiva somos afectados los humanos también”.
Sandoval dijo que estos incendios se evitarían teniendo en las zonas indígenas un trabajo constante de educación y sensibilización ambiental para “enseñar a hacer quemas controladas. Pero claro, eso requiere una política del Estado e inversión para poder lograrlo”.
Fuentes de la comunidad indígena informaron que este lunes por la tarde llegaron a El Tukuko aproximadamente 12 funcionarios del comando unificado, entre ellos, Bomberos de Machiques, Inparques, Protección Civil y bomberos forestales para trasladarse a la montaña y combatir los incendios.
Los habitantes de la comunidad aseguraron aplaudir la disposición de los funcionarios, pero destacaron que éstos no tienen las herramientas necesarias para sofocar las llamas. “Este pequeño grupo no va a poder apagar las llamas a pie, caminando hasta la montaña. Se necesita apoyo aéreo, la montaña Piyitakü es una montaña muy alta y empinada y además esa extensión de fuego es muy grande y 12 personas no pueden apagar las llamas”, destacó Sandoval.
Indígenas gritan auxilio
Katty Martínez, aseguró que esta zona está en emergencia por los focos de incendios.
«Tenemos alarma roja de incendio forestal en la Sierra de Perijá. Se quema la montaña Piyistaku, lugar sagrado para los indígenas Yukpas. Se necesitan helicópteros con tanques de agua urgente», dijo Martínez, quien solicitó al gobierno movilizar a los organismos con competencia para ayudar a apagar el fuego.
Martínez insistió que es necesario el apoyo aéreo con apoyo de las Fuerzas Armadas y del gobierno nacional pues «hemos observado que estos funcionarios que han llegado al Tukuko, primero no tienen transporte para movilizarse, no cuentan con hidratación suficiente, no hay una logística necesaria antes estos incendios. Ellos han solicitado apoyo de los caciques y de la comunidad en general porque tienen muy poco personal».