Este domingo 08 de noviembre se cumplen los 450 años la parroquia de Pozuelos en el municipio Sotillo del estado Anzoátegui.
Este es el punto más alto de Puerto La Cruz y fue el lugar de resguardo de los kariñas y cumanagotos para que evadieran saqueos de piratas.
En su 450 aniversario, demostrarán que su devoción por la Nuestra Señora del Amparo sigue intacta. Es por ello que celebrarán una misa a las 10:00 de la mañana en el templo construido en su honor.
De acuerdo con Alejandro Hernández, párroco del Santuario, la misa de este domingo se hará a puerta cerrada con poca presencia de fieles por petición del Obispo.
Sin embargo, la alcaldía de Sotillo instalará un toldo en la parte de afuera con sillas guardando distanciamiento social para que el resto de los vecinos pueda escucharla.
Hernández aseguró que cuentan con un termómetro para medir la temperatura de todos los asistentes así como gel antibacterial y alcohol para aplicarles como parte de las medidas de bioseguridad ante la COVID-19.
Paradógicamente, en este 450 aniversario, Pozuelos, a pesar de haber recibido el nombre por sus manantiales de agua, hoy padece de escasez de este líquido.
«Tenemos problemas con el agua, el aseo, con Cantv; no tenemos Internet porque se robaron los cables y todavía», expresó una de sus habitantes.
Mientras que otro usuario aseguró que solo hay agua en esos manantiales subterráneos que fueron hace tiempo fuente para las comunidades indígenas de los kariñas y cumanagotos.
«Antes habían tanques en varias partes pero se fueron eliminando. Ahora el agua está medio regulado porque llega una o dos veces a la semana y en horas de la noche. Tengo que trasnocharme para agarrar», expresó el vecino.
Este histórico punto de Puerto La Cruz tampoco cuenta con una red ambulatoria óptima para atender a la población.
De allí que sus habitantes hagan el llamado a las autoridades locales para que presten mayor atención a sus necesidades, especialmente ahora en sus 450 años.
Un poco de historia
Los cumanagotos llamaban a estas tierras «agua de lluvia» por tener manantiales subterráneos. Tras la llegada de los españoles, quedó con el nombre de Pozuelos por los pozos de agua que tenia.
Se dice que por aquella época, un barco salió de España para entregar una imagen de Nuestra Señora del Amparo a las autoridades religiosas de otras tierras. Pero una navegación tormentosa, sin velas ni timón, terminó desviando la embarcación a la bahía de Pozuelos para repararla.
Tan pronto como lo hicieron, volvieron al mar pero sin explicación alguna, el cuadro de la Virgen fue encontrado por los originarios en una canoa.
Desde allí quedaron enamorados de su imagen por lo que la llevaron a la comunidad donde le construyeron una capilla de barro para poder admirarla.
Tras fundado el primer asiento histórico del municipio, construyeron el Santuario Mariano de Nuestra Señora del Amparo, declarado Monumento Histórico Nacional en 1992.
Pozuelos perdió su toque colonial con la llegada de la exploración petrolera en 1950, convirtiéndose en parroquia en 1990. Pero a pesar del tiempo y los cambios sociales, la devoción por la Virgen del Amparo sigue intacta.
Este año, debido a la pandemia por la COVID-19, las reglas han cambiado y los habitantes se turnan para poder visitar a la virgen y agradecer los milagros recibidos.
