El Santuario Nacional Jesús Nazareno de Achaguas abrirá sus puertas a los fieles que deseen ofrecer sus plegarias por el bienestar del mundo.
Rodolfo Antonio Peña Velázquez, párroco rector del Santuario, informó que continúan ofreciendo oraciones en favor del cese de la pandemia del Coronavirus que perjudica al mundo entero.
Esto, siguiendo el decreto de cuarentena ordenado por el gobierno nacional, los entes de salud y siguiendo las orientaciones pastorales del obispo de la Diócesis de San Fernando, Monseñor Alfredo Enrique Torres.
Sin embargo, este Miércoles Santo, que era el único día del año en que apureños y foráneos acudían de manera masiva a pedir y pagar promesas al Nazareno, no se hará la acostumbrada procesión por las calles de Achaguas.
“Hemos culminado una jornada de oración de 360 horas continuas frente al santuario. También hemos ofrecido una novena en honor a Jesús de Nazareno, para que el señor con su poder, nos conceda que termine esta pandemia y las situaciones adversas que vivimos en Venezuela. Este Miércoles Santo estaremos realizando la eucaristía y luego haremos un viacrucis dentro del templo”, manifestó Velázquez.
Explicó además que “mantendremos el templo abierto hasta que existan fieles que vengan a venerar la sagrada imagen con la debida distancia, así podrán ofrecerles peticiones y rogativas a la imagen del Nazareno”.
El Jueves Santo seguirán en oración al santísimo hasta el día viernes. Asimismo, el sábado en la mañana celebrarán la misa de Gloria y para el domingo, la misa de Resurrección será a las 7:00 de la mañana para ofrecer gloria y gracias al señor.
Velázquez recordó que la Semana Mayor es para renovar la fe cristiana católica en los corazones de las personas. Instó a la feligresía a orar y a encontrarse con el Dios Todopoderoso.
De igual modo, el párroco invito a los feligreses a seguir guardando las prevenciones y la prudencia necesaria ante esta situación porque hay que cuidar la vida y la mejor medicina la tenemos nosotros en nuestras manos.
«Jesús nos hace saber en su pasión, en su muerte pero también en la resurrección, que nos guarda y nos protege de todo mal», culminó el presbítero.
Por Liliana Núñez | Radio Fe y Alegría Noticias