El presidente de la seccional Nueva Esparta del Sindicato Nacional de la Fuerza Unitaria del Magisterio, Faustino García, guarda las esperanzas de que muy pronto se firme la VIII contratación colectiva del magisterio venezolano.
García revela que el presidente de la República, Nicolás Maduro Moros, autorizó a las partes adelantar la discusión de la contratación colectiva del magisterio con la visión de unificar a los trabajadores del sector educativo, incluyendo no solo a todos los docentes del país sino también a administrativos y obreros, por cuanto las condiciones son comunes a todos estos trabajadores.
La actual convención colectiva del sector educativo se vence en el mes de octubre. Desde el 2018 hasta la fecha, según lo denuncian otros dirigentes gremiales y los propios maestros, el Ministerio del Poder Popular para la Educación mantiene una deuda que supera el 280 por ciento por el incumplimiento de pago de varias cláusulas salariales y sociales.
El profesor García asegura que en meas de trabajo se discutirán temas como la jornada única, seguridad social, la alimentación y los planes de adquisición de viviendas entre otros.
Supuestamente ya fueron instaladas estas mesas de trabajo. Una de las primeras tareas que haría es la de elaborar el cronograma de visitas a las regiones para consultar a las bases de los trabajadores,
Dice el dirigente sindical que las 8 federaciones participantes tendrán una visión de homologación atendiendo las peculiaridades de cada uno de los sectores involucrados.
Los anuncios públicos sobre el desarrollo de la consulta a escala nacional probablemente se harán entre el 22 y finales de junio, fechas en las cuales ya se debe tener lista una propuesta de convención colectiva para el ejecutivo nacional.
Pero, ¿mientras tanto qué seguirá pasando con los maestros y trabajadores de la educación de todo el país?
A principios del mes de mayo el presidente Maduro decretó un nuevo aumento salarial a 800 mil bolívares, unos 4 dólares mensuales, que todavía está muy lejos de las aspiraciones de los educadores y de poder alcanzar algo de la canasta alimentaria que ya supera los 100 dólares mensuales.
La hiperinflación, la escasez de algunos productos básicos, la falta de dinero en efectivo y ahora la modalidad de dar clases a la distancia, complican aún mucho más el panorama de los docentes en toda Venezuela.
Porque como han dicho algunos de los nuestros de Fe y Alegría la quincena apenas está alcanzando para comprar o medio kilo de queso o un a lo asumo un kilo de papas.