Un espacio para caminar con Jesús
Tips para discernir la realidad
Lunes 01 de enero de 2024
Por: Antonio Pérez Esclarín
Alimentar una esperanza inquebrantable
En el nuevo año que hoy comienza necesitamos alimentar una esperanza inquebrantable, que nace de la confianza profunda de que el Dios de la vida está con nosotros y sigue actuando a través de numerosas personas solidarias y generosas, que no se rinden y trabajan con empeño en la construcción de un país reconciliado y próspero, que nos permita a todos vida digna.
Ese sigue siendo el compromiso de Fe y Alegría para el 2024. Con su propuesta de alimentar la esperanza, se opone a la desesperanza que se ha adueñado de muchas personas que piensan que no hay nada que hacer, y que los esfuerzos y luchas no merecen la pena porque son inútiles. Los que han perdido la esperanza lo ven todo de manera negativa, no son capaces ya de captar lo bueno, lo hermoso de la vida y sobre todo de los esfuerzos y luchas por defenderla.
No aciertan a ver el lado positivo de las cosas, la generosidad y entrega de tantas personas solidarias, ni captan ya la alegría que brota del compromiso y la entrega. Fe y Alegría alimenta su esperanza con el testimonio de numerosos educadores, comunicadores y personas solidarias, que a pesar de las dificultades demuestran que es posible vivir de un modo servicial y generoso, y así gestar otra Venezuela más justa y más humana.
Fe y Alegría está convencida de que Venezuela tiene un hermoso futuro de progreso, convivencia y paz, futuro que debemos construir entre todos y para todos. En consecuencia, seguirá promoviendo en este nuevo año la reconciliación, el compromiso y el trabajo tenaz, para ir gestando ya desde sus centros y programas y con las comunidades la nueva Venezuela.
Con Tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.