Oración de la mañana. Sábado 25 de diciembre de 2021.
Por Mireya Escalante.
En Belén (Lucas 2, 1-14)
Hoy les invito a contemplar la palabra, como nos ha enseñado Ignacio. Acércate a un pesebre y siéntate junto a él y usando tu imaginación hazte un pastor y oye cuando el Ángel dice: “No teman, les doy una Buena Noticia, una gran alegría para todo el pueblo”. Detente ahí… métete en la escena. Lo importante es que hoy a ti, el ángel te sigue hablando… Piensa en qué temes, tómate tu tiempo… Y piensa… cuál es una buena noticia para todos.
Ahora ve con ellos al lugar donde hay un Niño recostado en un pesebre. Detalla lo rudo del lugar, el olor de animales, la extrema sencillez y humildad. Ves a María, cansada, con los ojos casi cerrados, pero quitando pajas que puedan molestar al niño, a José siempre callado pero irradiando una gran seguridad protectora para María y el Niño.
Tú formas parte de la escena… contémplala, oye lo que dicen, huele el establo, toca el suelo y la paja. Déjate tocar por la sonrisa inocente que ves en el rostro de ese hermoso bebé.
Y luego de un rato, habrás entendido el mensaje: ¡Gloria a Dios y en la tierra paz!
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.