Actitudes. Lunes 14 de febrero de 2022.
Por Antonio Pérez Esclarín.
Amar a Venezuela
La celebración el 14 de febrero del Día del Amor y la Amistad, me brinda la oportunidad de insistir en la necesidad de amar a Venezuela con un amor activo y eficaz que se traduzca en la decisión de trabajar sin descanso por sacarla del abismo en que se encuentra. El amor genuino no es un mero sentimiento o una emoción, sino que es un acto de la voluntad. Implica decisión, mucho coraje y capacidad de entrega y sacrificio.
Venezuela está gravemente enferma, languidece agobiada por tantos maltratos y penurias. Por ello, Venezuela necesita hijos generosos y valientes, capaces de asumir las dificultades como oportunidades para sanarla y fortalecerla. Ningún buen hijo abandona o se desentiende de su madre cuando está enferma, ni mucho menos aprovecha su debilidad y dolencias para robarla y beneficiarse.
Amar a Venezuela nos exige cuidarla, sanarla y protegerla: proteger las vidas de los venezolanos que malviven agobiados por las carencias y miseria, posibilitar el regreso de millones de hermanos que fueron expulsados por el hambre y la desesperanza, y curar la vida de la tierra, que sufre los desgarros y las brutales heridas que unas políticas extractivistas y saqueadoras que destruyen sus entrañas, contaminan ríos, matan árboles, vidas y fuentes de agua, y están acabando con culturas milenarias.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.