Una Palabra Oportuna No. 1908

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El objetivo de la educación

Como ya lo afirmaron los filósofos griegos, el objetivo de la educación debe ser el conocimiento de si mismo, hoy todo nos invita a vivir ajenos a nosotros mismos, incapaces de adentrarnos en nuestra interioridad, derramados en un mundo exterior cada vez más trivial, injusto e inhumano.

La vida es un don que se nos regaló por puro amor, pero es también una tarea y deberíamos hacer de ella una aventura apasionante. Nos la dieron la vida sin pedirla ni merecerla, pero no nos la dieron hecha. Nos toca a nosotros vivir nuestras vidas de un modo responsable y consientes para desarrollar todos nuestros talentos y realizar nuestra misión en la vida. Los seres humanos siempre somos seres humanos inacabados, proyectos inconclusos, que estamos en posibilidad de cambiar, de crecer de ser cada día más amables, más creativos, más serviciales.

Lamentablemente, hoy la mayoría vive de un modo rutinario, sin preguntas, sin atreverse a sumarse al misterio de sus vidas, sin tratar de plantearse cuál es su vocación y su misión. Propiamente no viven, son vividos por los demás, se dejan programar y moldear por una cultura que promueve la sumisión, la superficialidad, las apariencias, la ambición y el ansia de tener, que termina asfixiando y aplastando al ser.  

Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.