Espiritualidad. Lunes 22 de agosto de 2022.
Por Antonio Pérez Esclarín.
Trabajar por el Reino
Después de 2000 años en que Jesús nos propuso la revolución profunda del amor, el evangelio que podría convertirse en el espíritu caliente de un mundo nuevo, continua inédito y no ha penetrado en las estructuras políticas, económicas, sociales y religiosas. Ciertamente, otro mundo es necesario y posible y nuestra tarea, como seguidores de Jesús, es cultivar la esperanza y trabajar por el Reino, una sociedad de hermanos con su pasión y compasión.
El proyecto de Jesús tiene más vigencia que nunca y necesita de valientes que lo impulsen. Exige una continua conversión. Cambiar el corazón, los valores, marchar por un camino distinto al que nos proponen los poderosos, los que levantan su poder sobre la manipulación, la injusticia y la insensibilidad.
Seguir a Jesús es hacer nuestro sus criterios y valores. Jesús nos enseñó con su palabra y con su vida que la compasión, la no violencia, el servicio y el amor son los únicos caminos válidos para construir una sociedad justa y fraternal como la sueña el Padre
¿Qué pasaría en el mundo si empezamos a tomar en serio el evangelio?
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.