Oración de la mañana. Domingo 08 de diciembre de 2022.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza en el bautismo de Jesús
Señor Jesús, es un domingo especial. Te presentas ante Juan, acudes a bautizarte, sales del agua; se abren los cielos y se vio que el Espíritu de Dios bajaba como una paloma y se posaba sobre ti. Hijo amado, predilecto. Estas son las palabras que escuchas del Padre. El Espíritu es tu grandeza y tu alegría, te sientes habitado plenamente por él. Una fuerza nueva te nació por dentro. Te dedicas a anunciar la Buena Noticia de un Dios amigo de todos. Con tu estilo de vida encarnada, anonadada. Con gestos sencillos y palabras de verdad, te colocas abajo para servir y amar. Vienes a nosotros con el traje de siervo. Ahí ponemos nuestros ojos.
Nuestra identidad más profunda nos la da el Espíritu. Nos enseña a orar: Abba, Padre. “Nos hace capaces de eternidad. Esta es nuestra verdad más profunda. Llevamos su rostro dibujado en nuestro corazón. ¡Ya podemos pasar por esta vida, como él, haciendo el bien! Vivimos el bautismo como el más bello y sublime de tus dones, hacemos presente tu misterio de amor en la historia de cada día, emprendemos junto a ti caminos de Evangelio, vivimos en comunión con la Iglesia. En el Jordán se te cambió la vida; ¿dónde y cuándo se nos cambiará a nosotros? ¿Cómo es que tú, acudes a nosotros, cuentas con nosotros, te igualas a nosotros, te acercas tanto?
Necesitamos la experiencia transformadora del Espíritu. Ven a reanimar en nosotros la llama del amor. Revitalizar nuestras fuerzas. Recrear nuestra comunión con los pueblos de la tierra. Bautízanos, haznos descubrir la frescura original de tu Evangelio. Que aprendamos a ser hermanos de los pobres y de los últimos.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.