Oración de la mañana. Viernes 13 de enero de 2023.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza
Señor Jesús, esta mañana nos acercamos a uno de tus milagros, para encontramos con tu corazón compasivo lleno de ternura. Lo vemos y nos sirve para caer en la cuenta del milagro invisible que se ha realizado en el corazón. No solo curas la parálisis del cuerpo sino la interior, la parálisis del pecado, raíz de todos los males. Lo esencial del milagro del paralítico no es la curación externa sino la interior. “Son más importantes los milagros que no se ven”. El mundo de la gracia en el que nos movemos, lo que sucede en el corazón de cada uno, nuestros procesos de conversión a los que estamos llamados cada día.
“¡Vete en paz!”. La misericordia va más allá y transforma la vida, el pecado queda a un lado. Es como el cielo, miramos tantas estrellas; cuando llega el sol en la mañana, con tanta luz, las estrellas no se ven. Así es tu misericordia: una gran luz de amor, de ternura. Perdonas con una caricia exigente, curando nuestras heridas del pecado. Estás involucrado en el perdón, en nuestra salvación. Haces de confesor: “Vete, y de ahora en adelante ¡no peques más!”. Es grande la misericordia.
Solo tú puedes devolver a nuestras vidas el estado de gracia. Curas nuestras heridas con el bálsamo de tu amor. Qué afortunados somos, no tenemos que quitar tejas de los techos para encontrarnos contigo y obtener tu perdón. Basta con que demos el primer paso para encontrarnos con ese Padre maravilloso que había madrugado más que nosotros y nos ha tomado la delantera.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.