Un espacio para caminar con Jesús
Oración de la mañana
Viernes 04 de agosto de 2023
Por: Herlinda Gamboa
Narra: Julitze Maryurel
Señor, permite que siempre escuchemos a nuestros hermanos
Señor Jesús, hoy como ayer, hablar de Dios a quienes nos conocen desde siempre resulta difícil. Los de Nazaret se admiran, esta admiración no les lleva a creer en ti, sino a sentir envidia. Los conocías bien, sin escucharte se escandalizaban. Eran parientes, amigos, vecinos que apreciabas, deciden no recibir tu mensaje de salvación.
También nosotros encontramos que aquellos a quienes más amamos son quienes menos nos escuchan. Cuando vas a tu casa llevas la fama de tus milagros y tu palabra. Nosotros necesitamos reflejar santidad, dentro y fuera de casa antes de predicarles. Practicar un testimonio coherente.
Te vas para seguir rogando que tu palabra salvadora sea bien recibida en tu pueblo. Rezamos para que llegue a todos, aunque no quieran escuchar. Es la fiesta de San Juan María Vianney, un pastor según el corazón de Dios, que entregó su vida en humilde y abnegado servicio ministerial por la salvación de sus ovejas.
Siguiendo tus pasos, el santo Cura de Ars realizó su misión sacerdotal en clave de compasión con los fatigados y abatidos, ofreciéndoles una mano amiga que les permita ser redimidos. Su acción sanadora fue, sobre todo, de las dolencias y enfermedades del espíritu. Desde el humilde lugar encomendado a su cuidado pastoral, su fama se extendió por pueblos y ciudades, acudían las gentes hambrientas de paz. “Nuestro corazón es pequeño, la oración lo engrandece y hace capaz de amar a Dios. La oración es un anticipo del cielo”.
Profundo conocedor del interior del hombre, llevó su plegaria a multitud de gentes y las condujo a experimentar la ternura del Buen Pastor. Evocando su celo apostólico y su amor al sacramento de la reconciliación, elevamos nuestra plegaria por todos los sacerdotes. Necesitamos tomar tu mano que nos ofreces bajo la figura de un pastor sensible a nuestro dolor.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos
