Oración de la noche. Lunes 27 de julio de 2020
Por Javier. A. Fuenmayor, SJ.
“Damos gracias a Dios Padre, que nos ha hecho capaces de compartir la herencia del pueblo santo de la luz. Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas, y nos ha trasladado al reino de su Hijo querido” (Col 1, 12-13).
Te expreso, Señor, mi gratitud por todo lo que de ti recibimos cada día. Por cada detalle: gracias.
Sereno mi corazón queriendo contactar con el Espíritu Santo que va moviéndonos siempre a la gracia y el bien. Ayúdame a discernir su paso para ser consecuente con él. Uno mi corazón a las palabras del salmista: “Tu bondad y tu misericordia me acompañan todos los días de mi vida” (Salmo 22, 6).
Padre, ante ti reconozco mi fragilidad y todos esos pecados que me desordenan. Te pido perdón. Quiero comenzar una vida nueva.
“Mañana te serviremos en tu presencia mejor. A la sombra de tus alas, Padre nuestro, abríganos. Quédate junto a nosotros y danos tu bendición” (oración de Completas). Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.