Oración de la mañana. Viernes 18 de diciembre de 2020.
Por Herlinda Gamboa. Voz Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza, «silencio fecundo»
Señor Jesús, es tiempo de detenerse y descubrir en medio de la dinámica agitada de cada día la vida nueva que brota, que sigue ahí esperando. Cuánto nos cuesta callar, hacer silencio y escuchar… También escucharnos para que el silencio se haga fecundo. Hoy nuestro café quiere ser ese espacio donde podemos callar para escuchar y escucharte.
Nuevamente nos invitas a confiar, a no tener miedo, aceptar tu plan de salvación por absurdo que parezca. Contemplamos a José en la escena del Evangelio, el hombre del silencio prudente, fecundo, que hace posible junto a María, tu presencia entre nosotros. Aquí estamos intentando entrar en tu lógica, es bueno detenerse, pensar por un rato en lo que se ha hecho. En las conversaciones mantenidas, los rostros contemplados, las palabras dichas.
En los aciertos y en los errores, los compromisos adquiridos; las caricias dadas y las olvidadas. En las risas y llantos de ahora y de entonces. Detenerse en silencio, sin la urgencia del siguiente paso… así nos quedamos este rato…Ven, no tardes tanto.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.