A solo pocos días del reinicio de actividades académicas semi presenciales en este 2022, la Universidad Pedagógica Experimental Libertador en Maturín, Monagas, fue nuevamente vandalizada y robada.
En esta oportunidad también salió afectada el área de educación preescolar. La directora encargada de la institución, Neida Montiel, denunció los hechos y llamó a que se cumplan las promesas de resguardo a las casas de estudios por parte de las autoridades y los organismos de seguridad.
“Seguimos siendo visitados por los amigos de «lo ajeno» y cada vez es mayor el daño que le hacen a nuestra casa de estudios. No se conforman con robar, destruyen todo lo que está en pie. Esto afecta el desarrollo de las actividades administrativas y académicas”, expuso.
El nuevo hecho vandálico ocurrió el fin de semana y en esta oportunidad abrieron boquetes en las paredes para ingresar a los espacios administrativos, aulas de inglés, preescolar, sala de lectura y aulas para extraer aires acondicionados, equipos y material académico.
La situación de la UPEL se agrava ya que a lo constantes robos se suma el vandalismo y destrozos de los espacios donde se forman a los profesionales del sector educación en el oriente venezolano.
El Instituto Pedagógico de Maturín inició actividades administrativas el 10 de enero y las académicas el lunes 24 de enero y tanto las autoridades como los estudiantes han debido hacer frente a la constante actividad delictiva en sus espacios.
Los trabajadores y sus estudiantes han mantenido durante la pandemia jornadas de limpieza, ornato y adecuación de espacios pero estas acciones no son suficientes para el rescate de la casa de estudios y por ende reponer todo lo que ha perdido en cuanto a equipos, espacios destrozados, robos de cables eléctricos, piezas sanitarias, puertas, techos, material educativo y otras afectaciones desde el inicio de la pandemia.