El profesor de la Universidad Católica Andrés Bello, Leonardo Carvajal, compartió a través de Radio Fe y Alegría Noticias su óptica en torno a la consulta nacional sobre el inicio del nuevo año escolar 2020-2021 que impulsa el Ministerio de Educación.
Antes de dar a conocer sus consideraciones al respecto, reflejó en su análisis sobre la culminación atípica, producto de la pandemia, del pasado período académico en Venezuela.
Tajantemente arrancó indicando que la continuidad del último trimestre «a distancia» fue un «soberano e inmenso fracaso» para la mayoría de los jóvenes y niños en edad escolar.
Carvajal refirió que «la supuesta educación masiva on line la pensaron para Dinamarca o Canadá».
Dicho de otra manera, las autoridades educativas del país no consideraron el problemático contexto de deficiencias eléctricas y de conectividad que imperan en el país, entre otros aspectos.
Cree que en muy pocos planteles oficiales, en algunos públicos y en las escuelas de Fe y Alegría, (por su disciplina pedagógica, por la relación entre las familias, escuela y docentes), lograron cumplir con los objetivos planteados por el Ministerio.
Agregó que fue por la falta de equipos tecnológicos, las fallas de luz e Internet mencionadas «y por la falta de capacitación de los maestros eso fue un fracaso, una mentira».
Se opone a las clases presenciales
Al doctor en educación si le pareció pertinente que se haya abierto el debate propuesto por el gobierno en torno a qué hacer desde octubre hasta diciembre de cara al comienzo del nuevo lapso académico.
Sin embargo, radicalmente se opone a que el retorno a clases sea de forma presencial ni semi presencial. Esbozó tres razones para sustentar su posición.
En primer lugar porque es evidente para los venezolanos, dijo, que la expansión de la pandemia en el país comenzó hace mes y medio «y que no va a parar por ningún milagro».
En este sentido, cree que los casi 1000 casos diarios que se están reportando actualmente pasarán a ser 2 mil o 3 mil por día.
Añadió a este punto que si son los mercados y otros sitios de concentración de mucha gente los focos de contagio, «sería una suprema irresponsabilidad meter a muchachos en salones, en sitios de recreo».
Carvajal teme por las altas posibilidades de contacto espontáneo que existiría entre los niños en las escuelas.
La segunda razón para su oposición tiene que ver con que la inmensa mayoría de los planteles públicos no dispone de las condiciones sanitarias elementales y mínimas, no solo en las actuales circunstancias sino desde hace bastante tiempo.
Reseñó, por ejemplo, la deficiencia del servicio de agua potable y jabón en las instituciones educativas. Factores esenciales para mantener la higiene de manos y cara y minimizar los riesgos de contagio del Coronavirus.
El tercer argumento que expuso el miembro de la asociación civil Asamblea de Educación está relacionado con la deserción masiva de maestros.
Explicó que en el año escolar 2019-2020 se produjo una importante cantidad de renuncias de docentes «que ni siquiera les importaba renunciar formalmente por escrito».
Realidad que consideró se va a acrecentar en el futuro próximo ya que «en los testimonios de los maestros que hemos escuchado ellos dicen que por 5 dólares no puedo volver».
Y no es que no tengan vocación, apuntó el experimentado educador, sino que sencillamente «no pueden seguir dando clases en esta situación porque tienen que alimentar a sus hijos».
Criticó que desde el gobierno no han dicho ni una palabra «sobre un incremento muy sustancial de los salarios de los docentes que se necesita».
¿Qué propone en este contexto?
Leonardo Carvajal dijo no quedarse solo en el cuestionamiento de lo que se ha hecho y se ha dejado de hacer en materia educativa en Venezuela.
Por eso hizo una propuesta en dos sentidos de cara al nuevo año educativo.
El primer componente de su proposición consiste en un aplicar un proceso de recuperación de octubre a diciembre. Se trata de hacer un repaso para todos los estudiantes para recuperar el último período del año escolar que para su criterio «se perdió completamente y ese repaso no les viene mal».
Para alcanzar este objetivo, plantea elaborar y difundir «unas buenas clases televisivas. Que se reúnan 10 o 12 buenos profesores de Biología, Matemáticas y que preparen excelentes clases televisivas de repaso».
La otro arista que propone es reprogramar el calendario del año escolar. En esta línea dijo estar conteste con una idea anterior que ha venido planteando el Ministro de Educación Aristóbulo Istúriz de iniciar las clases a partir de enero.
En concreto, Carvajal sugiere comenzar el 16 de enero y seguir hasta el 7 de diciembre de 2021.
En cuanto a que si serían actividades académicas presenciales o bajo otra modalidad, el profesor universitario manifestó que todo dependerá de si mejoran sustancialmente o no las condiciones sanitarias en las escuelas para la fecha de inicio.
Este calendario incluiría dos semanas de vacaciones en Semana Santa; tres semanas en agosto; y cinco semanas desde el 7 de diciembre hasta el próximo 16 de enero.
Según sus cálculos, serían 210 días de calendario escolar. Un poco más de lo que se tiene actualmente.
