Un camión cisterna cargado con cientos de litros de combustible explotó este viernes 6 de noviembre en Freetown, capital de Sierra Leona, dejando un saldo de 99 personas fallecidas.
La información fue confirmada a la agencia Reuters por el ministro de Sanidad de ese país, Amara Jambaiha, tras un último recuento de víctimas.
Entre los fallecidos había personas que acudieron en masa para recoger el combustible que se escapaba del vehículo averiado, dijo Yvonne Aki-Sawyerr, alcaldesa de la ciudad portuaria, en una publicación en Facebook.
«Tenemos muchas víctimas, cadáveres quemados», dijo el general Brima Bureh Sesay, director de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres, en un video publicado en redes sociales desde la escena del accidente. «Es un terrible, terrible, accidente», expresó.
El siniestro se produjo por el choque de un camión cargado de piedras contra la cisterna que trasladaba combustible, provocando primero un derrame y después la explosión y un incendio, que afectó a numerosos puestos de venta callejera, vehículos, transeúntes y viviendas.
«Se trata de una zona muy habitada», aseguró Benedict Bangura, vecino de Freetown, «muchas motos y furgonetas de transporte que llevaban a decenas de personas quedaron completamente calcinadas».
En un primer momento fueron recuperados unos 80 cadáveres, según aseguró a la Agencia France Presse un miembro de Cruz Roja, sin embargo el balance de víctimas fue aumentando con el paso del tiempo.
Por su parte Julius Maada Bio, presidente de Sierra Leona, expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas por este hecho.
«Mi más sentido pésame a las familias que han perdido a sus seres queridos y a los que han resultado mutilados. Mi Gobierno hará todo lo posible para apoyar a las familias afectadas», escribió en Twitter.
Con información de Deutsche Welle, El País y Reuters.
