El gobierno de Alemania advirtió a sus ciudadanos que no tienen pensado relajar las medidas de confinamiento parcial impuestas hasta el 20 de abril.
El vicecanciller y ministro de Finanzas del país, Olaf Scholz, declaró a los medios de comunicación del país que se trata de resguardar las vidas de sus ciudadanos.
«Se trata de salvar vidas. Sería cínico empezar a discutir sobre cuestiones de salud y a la vez dar prioridad a lo económico», dijo Scholz.
Por otro lado, el ministro de Economía, Peter Altmaier, confirmó la decisión del gobierno a través de su cuenta de Twitter:
«Es prematuro y por tanto incorrecto pedir que se suavicen las medidas de cierre mientras sigue subiendo el número de contagios», expresó.
Los números suben rápidamente
El cierre parcial de la vida pública en el país europeo se acordó el pasado 22 de marzo entre la canciller Angela Merkel y los jefes de gobierno de los estados federados.
La reiteración de dicho cierre responde al rápido ascenso en el número de casos de COVIC-19 registrados en el país, que se duplica cada cinco días y supera los 57 mil contagios, con 455 víctimas mortales.
«No podemos bajar el nivel de las medidas acordadas mientras persista un nivel de contagios como el actual. Tiene que bajar la curva», dijo el vocero del gobierno alemán, Steffen Seibert.
