AN declara al Parque Canaima en estado de grave emergencia ambiental

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En sesión virtual de este martes 7 de julio, la Asamblea Nacional que preside Juan Guaidó aprobó un proyecto de acuerdo en el cual se declara al Parque Nacional Canaima, ubicado en el estado Bolívar, en estado de «gravísima emergencia ambiental».

Según el acuerdo, la política extractivista de oro impulsada por el gobierno de Nicolás Maduro ha originado un serio ecocidio, a través de la explotación del Arco Minero del Orinoco, en todo ese biosistema declarado como Patrimonio Natural de la Humanidad por la ONU en 1994.

La diputada María Gabriela Hernández, proponente del proyecto, agregó que la decisión legislativa también conlleva a notificar a la Organización de Naciones Unidas y a la UNESCO de los riesgos de daño ambiental que amenazan los recursos naturales del Parque.

Explicó la parlamentaria que el objetivo a alcanzar con el acuerdo es que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) lleve adelante investigaciones y exigir, por las vías institucionales, el cese de la explotación minera en Canaima, sus adyacencias y cualquier otra Área Natural Protegida del país. 

Hernández señaló que el Acuerdo insta a promover junto a la UICN, la constitución de una comisión técnica, integrada por representantes de instituciones académicas nacionales y organizaciones internacionales, para que hagan una evaluación de los impactos provocados por la minería en Canaima y se establezcan mecanismos técnicos y financieros para su recuperación y preservación. 

En el Acuerdo también se exhortó a presentar ante las instancias nacionales e internacionales estas denuncias con el fin de establecer y sancionar los delitos contra los Derechos Humanos y los de carácter ambiental, derivados de la actividad minera en el Parque Nacional Canaima. 

La actividad extractivista también perjudica notablemente las condiciones de vida de los pueblos indígenas de la zona, cuyos líderes han denunciado en varias oportunidades los efectos de la misma.

En el pasado mes de mayo diferentes ONG de Bolívar sobre la defensa de los derechos ambientales denunciaron que las operaciones del extractivismo ya había desforestado más de 1000 hectáreas del Parque y contaminado uno de los ríos más importantes que se encuentra adentro: El Carrao.