Antes del fin de año decidirán sobre estatus de Alex Saab

96
Alex Saab
Archivo

El juez Robert M. Scola, funcionario de la justicia de Estados Unidos que está a cargo del caso de Alex Saab, anunció que «la próxima semana» decidirá sobre el estatus del empresario acusado por varios cargos de lavado de dinero.

El 20 de diciembre, Saab compareció ante Scola donde las partes involucradas volvieron a exponer sus respectivos argumentos en un intento de lograr una decisión definitiva, pero una vez más Scola le dio larga al asunto.

La defensa de Saab lanza sus argumentos jurídicos con el claro objetivo de invalidar el proceso legal que se le sigue al empresario de origen colombiano, quien además sería el presunto testaferro del presidente Nicolás Maduro.

Hasta este momento, el dilema es que el juzgado reconozca o no el estatus de diplomático de Saab, y partir de allí proceder con la exigencia respecto a su «inmunidad diplomática».

¿Alex Saab pudiera ser liberado?

Joshua Goodman, periodista de la agencia internacional de noticias Associated Press, publicó que durante la audiencia del 20 de diciembre, el juez Robert M. Scola «planteó si tiene sentido reconocer la inmunidad diplomática que alega el acusado teniendo en cuenta que el gobierno de Estados Unidos no reconoce a la administración de Nicolás Maduro».

«Los fiscales argumentaron que dado que el gobierno de Estados Unidos reconoce como presidente de Venezuela al líder opositor Juan Guaidó, por ende desconoce el de Maduro y, en consecuencia, sus nombramientos», reseña El Nacional.

Este argumento cambia el panorama jurídico a favor de Saab. La misma fiscalía que actúa como parte acusadora habría reconocido que en un hipotético reconocimiento a Saab como diplomático, el colombiano «quedaría en libertad».

¿Y luego?

No obstante, los cargos en su contra permanecerían. Este último acto provoca un vacío judicial entorno al caso de Saab, porque su reconocimiento como diplomático impediría cualquier proceso judicial en su contra, aún con los cargos que se les sigue.

Según la acusación, entre 2011 y por lo menos 2015, Saab y su socio Álvaro Pulido, que está prófugo, conspiraron con otros para lavar las ganancias de una red de corrupción sustentada en sobornos dirigidos a obtener contratos para realizar proyectos públicos y fraudes al sistema de control de cambio de divisas en Venezuela.

Guaidó insiste en que Saab no es diplomático

El dirigente político de la oposición, Juan Guaidó, insiste que Saab no es diplomático, sino un «delincuente que robó miles de millones de dólares».

Guaidó, aprovechó la oportunidad para argumentar a favor de su “proyecto de reforma de estatuto que rige la transición a la democracia para restablecer la vigencia de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, y garantizar su permanencia como supuesto «presidente encargado» pese a todos los cuestionamientos jurídicos, sociales y políticos en su contra.

«Por eso la dictadura quiera acabar con la presidencia encargada, busca impunidad y confundir al mundo nombrando ‘diplomáticos’ a delincuentes y testaferros», publicó Guaidó.