Debido a los constantes apagones registrados en las horas en la entidad merideña, diversas áreas de salud del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula) se han venido afectando.
Joel Manuel Gómez, dirigente político y activista gremial del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula), afirmó que los cortes eléctricos repercuten en la prestación de servicio asistencial, como con aquellos pacientes que se encuentran conectados a un respirador, los que están siendo dializados o los que están recluidos por otras patologías médicas.
“Pareciera que los meses de enero y febrero fueran los meses de la oscuridad. El fluido eléctrico repercute en la prestación de servicios asistenciales: es a través de la electricidad que se brinda atención médica, diagnóstico paraclínico y las intervenciones en los quirófanos”, aseguró Gómez.
Igualmente refirió que aunque el hospital posee 2 plantas eléctricas las mismas colapsan, debido a la carencia del combustible para poder mantenerlas operativas al 100%.
“El abastecimiento del combustible no permite que las plantas eléctricas tengan el soporte para sufrir los embates eléctricos, por eso hacemos el llamado a las fuerzas vivas a levantar su voz de protesta en especial de los médicos”, manifestó el representante gremial.
