Comerciantes de Maturín, Monagas, exigen a las autoridades municipales permitir la reapertura de los comercios sancionados y programar un plan de pago que sea coherente con el momento económico del país.
Tras el cierre de 5 establecimientos asiáticos por parte de la Dirección de Hacienda Municipal ha crecido el descontento por parte del gremio de los comerciantes sobre las ordenanzas de actividades económicas, cuyos impuestos y multas siguen subiendo y su valor debe ser cancelado en dólares.
Los comerciantes sancionados aseguran que no están en condiciones de pagar dichas multas y que podría ponerse en riesgo los puestos de trabajo de más 300 padres de familia con estas medidas.
En cuanto a pronunciamientos oficiales sigue sin conocerse por parte del alcalde de Maturín, Wilfredo Ordaz, y de parte del director de hacienda municipal.
Entre tanto, los comerciantes han generado acciones de protestas para llamar la atención de las autoridades. La semana pasada se dio el cierre por 24 horas de locales y comercios que se sumaron a los reclamos para exigir la instalación de una mesa de trabajo donde se incluya la participación del sector comercial.
No descartan que esta semana de cuarentena radical, la última del año, también se efectúen otras jornadas de protesta hasta que se dé la mesa de trabajo y se reabran los negocios que han sido sancionados.
Por su parte, la gobernadora de Monagas, Yelitze Santaella, instó a las partes a sentarse a dialogar para solucionar la problemática que atenta contra la actividad comercial y laboral de cientos de maturinenses.
