Comunidad Villa Hermosa de Maturín “está olvidada”

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Villa hermosa Maturin
Foto: Radio Fe y Alegría.

Desde la comunidad Villa Hermosa en Maturín llevan 12 años de promesas incumplidas y los habitantes aún se mantienen con la esperanza de ser dignificados algún día en cuanto a servicios públicos, la alimentación y la vivienda se refiere.

Las 103 familias que conforman esta comunidad están sumergidas en diersos problemas, pero el más urgente es el agua. Para acceder a ella, deben cargar desde otros sectores, donde se abastecen gracias a pozos artesanales y dos tanques de 500 litros donados hace 4 años, que figuran como la única ayuda gubernamental que han recibido.

Yoleida Lagente, residente desde hace diez años de la calle principal de Villa Hermosa, denunció que no cuentan con tuberías de distribución de aguas blancas, y por ello deben caminar hasta dos kilómetros para traer a sus ranchitos.

“Aquí el agua es horrible. No tenemos aguas blancas ni aguas negras, solo peroles para llenar”, expresó Lagente. “Es una prioridad que tenemos, pero el gobierno no nos escucha”.

Aseguró que al caer cualquier lluvia se alegran, pues “es una bendición del cielo”, porque la terminan utilizando para necesidad básicas.

No obstante, el hecho de que llueva implica que los residentes deben salir “con bolsitas en los pies porque esto es barro y charco”.

“No hay vialidad por ninguna parte y si no queremos perder los zapatos es lo que toca para poder salir”, comentó.

“Esta comunidad está olvidada”

A Liamar Pérez la encontramos pasadas las 10 de la mañana haciendo su tercer viaje de carga agua desde el pozo de la calle 6 para su vivienda y la su madre que es mayor y que habita un ranchito al lado del suyo.

“Cargar agua es lo que toca porque no tenemos otra manera de conseguirla. Si tenemos para pagarle al cisterna, no entra porque la vialidad está muy mala. Esto es calles de tierra por todas partes y si tuviésemos para pagarla no lo hacemos porque la comida es prioridad”, señaló.

“Esta comunidad está olvidada no tenemos nada ni agua, ni electricidad, ni vialidad, no hay empleo. Los niños crecen sin espacios de juego; muchos desde ya chamitos cargando el agua todos los días… sin futuro”, indicó.

Villa hermosa Maturin
Foto: Radio Fe y Alegría.

Cargando agua y sembrando en el patio

María Rodríguez, quien vive en la segunda calle de la comunidad Villa Hermosa, aseguró: “uno tiene que estar cargando el agua caminando, en carrucha o carretilla. Si me la presta algún vecino, a veces voy a cargar hasta seis veces, y es agotador”

Rodríguez no cuenta con tanques de almacenamiento y, al igual que muchos de sus vecinos, tiene una nevera vieja frente a su ranchito donde va depositando el agua.

“Esta nevera vieja se la pedí a un amigo, para que cuando llueva se llene del agua que cae y así descanso de cargar uno o dos días. Como es limpia el agua de lluvia la usamos para uno bañarse, lavar la ropa, los corotos”, expresó.

El rancho de Rodríguez es de 3X4 y sus láminas muestran el deterioro. Por eso pide al gobierno que la visite y la censen para que le den los materiales y ella misma, con sus muchachos, pueda construir una casa digna.

“Llueve y uno tiene alegría y tristeza. Alegría por el agua que llega, y tristeza porque todo se me moja y la construcción se afecta. Yo como muchas madres de este sector tengo la necesidad de un techo digno. Cuando llueve el agua me inunda todo”, sentenció.

Rodríguez vive con sus cuatro hijos y, como muchos de los residentes, no cuenta con un trabajo estable y, entre otras cosas, siembra en su patio lo que puede.

Villa hermosa Maturin
Foto: Radio Fe y Alegría.

“Trabajo no tengo y toca sacar adelante a los niños como puedo, porque el papá ayuda, pero igual lo que les trae no alcanza. Luchamos cada día, yo siempre tengo mi platanito, mi cambur, lechoza, guayaba y una que otra gallina”, comentó.

Inseguridad

Cuando cae la tarde en Villa Hermosa los vecinos se encierran en sus viviendas por la inseguridad que reina y se ampara en la falta de luz en las calles.

“Solo tenemos electricidad en dos postes y solo alumbra dos calles, el resto oscuridad y luz artesanal en los ranchos. Viene gente de afuera y se llevan bombonas y hasta las botellas donde se carga el agua. Por eso nos encerramos temprano por la oscuridad y la delincuencia”, explicó Lagente.

Villa hermosa Maturin
Foto: Radio Fe y Alegría.