La escasez de agua potable en comunidades de San Juan de los Morros es cada vez más grande. El periodo de sequía entró en medio de una cuarentena social ante la COVID-19.
Sectores del Casco Central, la parte alta de La Morera, Brisas de Valle, Santa Rosa, Las Palmas y El Guafal son algunas de las comunidades que no reciben agua por tubería desde hace varias semanas.
Tampoco les han habilitado camiones cisternas para solventar esta situación que perjudica a sus habitantes, quienes deben pagar hasta 5 dólares por un tanque de mil litros.
Esta problemática se extiende a los municipios Miranda, Monagas, Infante y Zaraza desde donde se reporta a diario, a través de las redes sociales, las fallas del servicio sin que resuelva la situación. Esto, a pesar que la empresa Hidropáez reporta que están reparado las tuberías dañadas para enviar el agua.
Por su parte, el gobernador de la entidad llanera, José Vásquez, se pronunció al respecto y destacó que en estos momentos «estamos en un verano inclemente», por lo que están solucionando los problemas de conexión para que llegue el agua al municipio Roscio.
“En algunos municipios, el sistema es de pozos profundos. Hay municipios con 20 o 30 pozos, eso necesita de bombas sumergibles que han llegado y que tienen un valor aproximado de 3 mil 500 millones de bolívares, con todos sus accesorios”, informó Vásquez.
Así mismo ,expuso que tenían “planes emergentes a través de cisternas para distribuir el agua potable”, sin especificar la cantidad de unidades disponibles.
Calles con huecos
A diario aumentan los botes de agua en las calles guariqueñas, trayendo como consecuencia el deterioro de algunas avenidas de las ciudad sin que se observen reparaciones inmediatas por parte de las cuadrillas de Hidropáez.
