Criollos pusieron su granito de arena para que Atlanta ganara la Serie Mundial

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Foto: agencias.

Luego de 26 años de sequía los Bravos de Atlanta se impusieron a punta de poder a los Astros de Houston este 2 de noviembre con pizarra de 0 – 7 en la Serie Mundial de las Grandes Ligas.

Los de Atlanta fueron los más bravos y obtuvieron el Trofeo del Comisionado, el cual se entrega al equipo campeón de la Major League Baseball, premio que también fue labrado por siete venezolanos quienes pusieron a disposición su poderío al bate, tórrida defensa y estrategia dentro del clubhouse para forjar la personalidad ganadora de este equipo.

Ronald Acuña Jr., «El De la Sabana», no pudo ser de la partida para Atlanta en los Playoffs debido a una lesión que le impidió abrochar una sólida campaña. En 82 partidos disputados pegó 24 jonrones y dejó un average de .283.

Caso contrario le ocurrió al utility Ehire Adrianza, quien sí participó en los Playoffs con los Bravos con 10 turnos al bate y un solo hit. Durante la temporada regular jugó 109 compromisos con un promedio de .247, cinco cuadrangulares y 28 impulsadas.

Orlando Arcia llevó sus «joyitas a la defensiva» de Milwauke a Atlanta, y aunque no tuvo un papel estelar se mantuvo en el roster de Brian Snitker. En la postemporada no realizó ningún aporte con el bate en cuatro turnos, mientras que en la temporada regular disputó 32 juegos para dejar un promedio de .198, con dos jonrones y 14 impulsadas.

William Contreras, el joven venezolano receptor de Atlanta respondió y con creces cuando se le requirió sus servicios. Durante la campaña participó en 52 encuentros para promediar .215, con ocho jonrones y 23 impulsadas, en postemporada fue otro cantar, solo tuvo un turno al bate en donde no pudo conectar de hit.

Los coaches y los que ya no están

En el juego del diamante no solo es importante lo que se hace dentro del terreno, también afuera de él, allí brillaron los criollos Tomás «Tomasito» Pérez, Eduardo Pérez y José Yepes, quienes al mismo tiempo mantenían la química de los jugadores arriba y le ayudaban a mejorar en sus falencias.

Pablo Sandoval «El Kung Fu Panda», quien fue moneda de cambio por Eddie Rosario y pasó de Atlanta a los Indios de Cleveland, jugó un total de 69 partidos con los Bravos en la temporada 2021, por esta razón recibirá su cuarto anillo de campeonato, empatando a la leyenda Luis Sojo.

Ender Inciarte que fue la cara del equipo durante varias campañas se despidió de Atlanta. El experimentado zuliano solo disputó 52 juegos en la temporada 2021, aún así también recibirá su anillo que lo acredita como campeón.

Los Bravos fueron el vivo ejemplo de aquel refrán que dice «no importa como comiences, sino como terminas». En los primeros 20 partidos tuvo récord de 9 victorias y 11 derrotas, luego se llenaron de lesiones, pero de repente algo hizo click, los lanzadores empezaron a tener actuaciones brillantes, los batazos empezaron a salir en momentos claves y cada día el traje de héroe se lo ponía un jugador diferente.

«Nos topamos con todos los problemas y los obstáculos que podían haber surgido en el año», dijo Freeman. «Las lesiones y todo eso. Todo lo que podía salir mal salió mal. Pero nos recuperamos de cada una de esas cosas».

Para ganar de visitante hay que tener personalidad y así lo demostró Bravos, un carácter que también se construyó a punta de arepas y sabor a Venezuela.