Este 2 de marzo, Miércoles de Ceniza, se da inicio a la cuaresma que representa el camino de conversión para los feligreses de la Iglesia católica.
Este año, la Iglesiaa está llamada a fomentar la reconciliación de todos los hermanos con la frase «conviértete y cree en el evangelio» que enuncian los sacerdotes al momento de trazar la cruz en la frente de cada devoto.
El padre Alfredo Infante, SJ, en conversación con Radio Fe y Alegría Noticias para el programa De Primera Mano, aseguró que los cuarenta días de Jesús en el desierto significan para estos tiempos una invitación a caminar juntos hacia una humanidad reconciliada, a fin de construir el reino de Dios.
«No podemos vivir desde el resentimiento», afirmó el padre Infante, párroco de la iglesia San Alberto Hurtado en La Vega de Caracas, ante los hechos que han sacudido al mundo recientemente.
También llamó a las familias venezolanas a reconciliarse entre ellas mismos y entender que estos tiempos de crisis social y económica representan el desierto como penitencia para llegar a la Pascua.
Tres pasos para lograr la reconciliación
Este Miércoles de Ceniza el padre Infante recordó que hay tres sencillos pasos para que un fiel creyente obtenga un alma reconciliada.
Oración, ayuno y solidaridad. Cada una debe hacerse desde la fe y la gracia.
La oración debe estar dirigida a Dios como un auxilio y acto de convencimiento en el Señor. El ayuno debe contener voluntad personal y esfuerzo. Mientras que la solidaridad es abrirse a generar procesos de conexión con otros haciendo un acto de bondad.
«Son elementos que se nos ofrecen para la vida. A través del ejercicio interior que se pueda identificar cómo está la relación con los demás, consigo mismo y la naturaleza. Es un ejercicio para que la voz de su palabra entre en conciencia y poder ir creciendo», describió el sacerdote sobre estos tres pasos a seguir donde se trata de coexistir por más daño que exista en el mundo.