Los más de 30 tornados que el viernes 10 de diciembre devastaron estados del sur y del medio oeste de EEUU, dejaron por ahora 78 muertos y decenas de desaparecidos, aunque las autoridades no descartan que la cifra de fallecidos sea superior.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, informó este lunes en una rueda de prensa de que solo en su estado – el más afectado – unas 64 personas han perdido la vida y que todavía siguen sin localizar otras 105, por lo que la cifra de víctimas mortales «ciertamente estará por encima de 70, tal vez incluso de 80».
A esos 64 fallecidos en Kentucky se suman seis muertos en Illinois tras el derrumbe parcial de un almacén de la empresa de comercio electrónico Amazon; otros dos en Arkasas -uno de ellos en una residencia de ancianos-, cuatro más en Tennessee y otros dos en Misuri.
Beshear destacó que en su estado miles de casas han sufrido daños o están completamente destruidas: «Pueden pasar semanas antes de que tengamos el conteo final tanto de muertes como de niveles de destrucción», dijo el gobernador.
Aun así, la cifra de fallecidos sería inferior a los más de 100 muertos que el propio Beshear temía en un principio, hasta que la empresa propietaria de una fábrica de velas comunicase que los desaparecidos en su planta de Mayfield (Kentucky) no rondaban los 70, como decía el gobernador, sino que solo eran ocho.
Noche de terror
En total, cuatro tornados impactaron en la noche del viernes en Kentucky, incluido uno que recorrió más de 220 millas (350 kilómetros) a lo largo de varios estados, el que más distancia ha cubierto desde que hay registros en EEUU.
La administradora de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, en inglés), Deanne Criswell, advirtió en una entrevista con la cadena CNN de que este tipo de fenómenos meteorológicos extremos va ser la «nueva normalidad».
En ese sentido, agregó, los efectos causados por el cambio climático son la «crisis de nuestra generación».
Uno de los tornados dejó seis víctimas mortales al causar el derrumbe parcial de un almacén del gigante del comercio electrónico Amazon en Edwardsville (Illinois).
Los fallecidos ya han sido identificados, y tenían entre 26 y 62 años de edad, pero las tareas de búsqueda y de desescombro continúan este lunes, pese a que no se espera encontrar a más supervivientes.
Las autoridades inicialmente temieron una tragedia todavía mayor debido a que el tornado llegó en pleno cambio de turnos de trabajo en el almacén y no sabían a ciencia cierta cuánta gente se encontraba en esta nave industrial, inaugurada en 2020 y donde trabajaban cerca de 200 personas.
El Servicio Meteorológico Nacional indicó que los datos preliminares apuntan a que este tornado de Illinois, al igual que el que recorrió varios estados, fue de categoría F3 en la escala de Fujita, de un máximo de 5 y que genera vientos de entre 136 y 165 millas por hora (225-265 km/h).
Fuente: efe