Esta temporada de mangos, al igual que las de los últimos siete años, está siendo aprovechada por los deltanos para sobrevivir a la crisis económica venezolana.
Ante los altos precios de los productos alimentarios y los bajos salarios, hay personas que venden mangos y otras que los compran, porque es relativamente barato y “llena el estómago”.
De acuerdo con dos vendedores de mangos del centro de Tucupita, capital de Delta Amacuro, “todo ha estado bien”; es decir, que sí han tenido buenas ventas, considerando que el precio del kilogramo de esta fruta no sobrepasa los 10 bolívares, sean maduros o verdes.
Daniel Pereira, un ciudadano que vive en el centro de la capital deltana, se ha dedicado a la reventa de mangos. Él adquiere las frutas relativamente baratas y luego las revende en 10 bolívares. Gracias a esta temporada de mangos, ha podido conseguir un dinero extra para sobrevivir.
A diario Pereira puede llegar a vender hasta 30 kilogramos de mango y con lo que se lleva a su casa, es suficiente para comer con su familia. Él agradece la temporada de esta fruta.
Por otra parte, Ronald Heredia, un ciudadano que vende mangos en las cercanías del mercado municipal de Tucupita, dijo que el mango ha sido uno de los rubros más buscados por los deltanos y supone que todo se debe a su bajo precio.
Heredia consigue sus mangos en el estado Anzoátegui y logra venderlos todos en Tucupita.
Aseguró que no solo vende: en ocasiones ha tenido que regalarle a las personas que no tienen dinero y le piden un poco de esta fruta.
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