La militarización en el poblado de la Guajira no es ajena para quienes viven en esta zona ya que son imposiciones desde el gobierno nacional sin ninguna consulta previa.
El sufrimiento, más la vulneración de derechos de esta comunidades indígenas ubicadas al occidente del país, en el estado Zulia, ha hecho que el pueblo rechace la presencia militar, ya que anteriormente ha dejado tristes episodios de violencia.
Este miércoles se volvió a percibir como la Fuerza Armada instalaron alcabalas con más de 12 efectivos, generando colas a lo largo y ancho de la Troncal del Caribe con una revisión minuciosa que generó molestias de quienes transitan por esta vía internacional.
Los pobladores se preguntaban si la real intención era garantizar la soberanía nacional.
José David Gonzales, coordinador del comité de Derechos Humanos de la Guajira, calificó como negativa esta movilización militar en la frontera “pues desde el comité hemos denunciado violaciones de derechos en manos del ejército. Es por eso que la población rechaza cualquier incursión militar en las comunidades indígenas»,
«Volvemos a estar alertas mientras se mantenga esta movilización y denunciaremos cualquier situación que atente contra la vida de quienes viven en esta frontera», aseguró.
La frontera de la Guajira se encuentra sumergida en una crisis social, donde las mayoría de la población están involucrados en trabajos con el contrabando y la venta ilegal de combustible.
Álvaro Vieco, un poblador de Paraguaipoa, manifestó sus descontento ya que “no entiendo con quién vamos a pelear cuando nuestro pueblo está muriéndose de hambre. Este es el municipio más pobre y los militares han violado el territorio por años”.