Diócesis de San Fernando prepara plan de formación espiritual

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Foto: Ender Moissant

La Comisión Diocesana Pro- Beatificación del Venerable Siervo de Dios José Gregorio Hernández ha diseñado una propuesta de evangelización hasta el mes de diciembre, con el objeto de «favorecer una verdadera renovación espiritual y del compromiso misionero en la Diócesis de San Fernando de Apure.

Monseñor Alfredo Torres, Obispo de esta Diócesis, explicó que esta propuesta se desarrolla desde el mes de julio entre los Movimientos de Apostolado, en las Familias y a través de las Redes Sociales, considerando las medidas de distanciamiento físico establecidas por las autoridades sanitarias.

Dijo el obispo Torres que además de  los Foro- Chat sobre las cualidades y virtudes del llamado médico de los pobres, este itinerario de formación espiritual se llama Camino de Encuentros, y que versa sobre temas formativos mensuales en torno a la figura de José Gregorio Hernández, acompañados de la Adoración Eucarística con lo cual se busca preparar el terreno para que la semilla de la Beatificación dé buenos frutos en Apure y en Venezuela.

Destacó además que la exhumación de los restos del Venerable se realizará a mediados del mes de octubre de este año y que ya se está considerando el lugar donde reposará la Reliquia de José Gregorio Hernández Cisneros que se asignará a la Diócesis de San Fernando.

El prelado anunció días atrás que probablemente la ceremonia de beatificación del doctor Hernández se efectúe en el primer semestre del 2021 por el papa Francisco.

Vale recordar que el milgaro que catapultó al doctor José Gregorio Hernández fue la sanación de la jovencita guariqueña Yaxsury Solórzano, quien en el año 2017, cuando andaba con su papá, unos asaltantes de camino amenazaron con atracarlos, y la niña recibió un disparo en la cabeza que le supuso desprendimiento de masa encefálica.

Cuando fue trasladada al hospital de San Fernando de Apure el pronóstico médico fue totalmente pesimista. Las probabilidades de que pudiese quedar con vida eran prácticamente nulas.

Su madre, la señora Carmen, se encomienda al doctor José Gregorio, y el médico le habría respondido que no se preocupara, que él iba a operar a Yaxsury y que la iba a salvar.

A los tres días de la operación la jovencita caminaba y reía como si nada le hubiese pasado.

El médico de los pobres la había curado milagrosamente.