La Subsecretaria interina de la Oficina de Asuntos para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EEUU, Julie Chung, exigió este martes 9 de febrero al gobierno venezolano que cese su hostigamiento a las organizaciones no gubernamentales del espacio humanitario.
La alta funcionaria señalaba en su cuenta de Twitter que el «acoso persistente» perjudica la asistencia humanitaria a la población venezolana, sumida en altos niveles de pobreza crítica y con serios problemas para acceder a servicios básicos como agua potable, alimentación y salud.
Condenamos el acoso persistente de Maduro a las ONGs, que amenaza la entrega de asistencia a los venezolanos que sufren.
— Julie Chung (@WHAAsstSecty) February 9, 2021
Los venezolanos merecen elecciones libres y justas, no un dictador que interfiera con la ayuda a su propio pueblo para mantenerse en el poder.
Por otro lado, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, también habló este martes y confirmó que Estados Unidos había aportado a Venezuela más de 47 millones de dólares solo para temas de agua, saneamiento y la vigilancia en respuesta a la pandemia de la COVID-19.
Price agregó que el nuevo presidente Joe Biden entiende, sobre la crisis de Venezuela, que esto es producto de la “dictadura de Maduro”.
También aseguró que el nuevo gobierno norteamericano revisa actualmente el impacto de las sanciones económicas aplicadas al país en los últimos años y se comprometió a diligenciar «si hay formas en que podamos proporcionar asistencia humanitaria adicional, si hay formas de aliviar aún más el sufrimiento del pueblo venezolano, ciertamente lo haremos».
.@StateDeptSpox Price on Venezuela: "We are committed to supporting Venezuelans who are suffering due to the crisis caused by the Maduro regime." pic.twitter.com/lruRMMAisY
— Department of State (@StateDept) February 10, 2021
Para este miércoles representantes de varias ONG venezolanas, aún sin conocerse cuáles serían, fueron convocados por una comisión especial de la AN para que rindieran información sobre el destino que le dan a los fondos que reciben por concepto de ayuda humanitaria.